La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su más enérgico repudio ante la actitud de los empresarios responsables de la Fábrica de Zapatos CA.DE.IN. S.R.L., ubicada en el Barrio de Alta Córdoba de la Ciudad de Córdoba, quienes realizaron un cierre de la empresa de manera sorpresiva, dejando más de 60 trabajadores en la calle, los que a su vez denuncian serias violaciones a la ley de contratos de trabajo y a la ley en general por parte de los empresarios.

Señor presidente:

La fábrica de zapatos CADEIN, ubicada en el Barrio Alta Córdoba de la Ciudad de Córdoba, fue fundada en el año 2005 por el empresario Fabio Zanetti. Produce zapatos y zapatillas de marca propia y para marcas de primera línea como La Dolfina, Batistella, Palo B, Insomnio, Gotardo, Falabella y AF jeans, entre otras.

Desde el día 8 de octubre, los trabajadores se encuentran apostados frente a las puertas de la fábrica en Alta Córdoba en demanda de la preservación de los 64 puestos de trabajo, la “normalización” del pago de sus salarios e información fidedigna sobre el destino de la empresa.

La medida se produjo luego de que les fuera comunicada la suspensión del total de los operarios sin haber acreditado los pagos hasta el viernes último, y tras haber intentado “vaciar” la fábrica de materiales, maquinarias y mercadería, por la noche durante el fin de semana.

Es por esto que mantienen una vigilia para evitar que saquen elementos de la fábrica y que los empresarios se vean forzados a encontrarse con ellos a dialogar. Según indicaron los trabajadores, la antigüedad de los mismos va desde los 5 a los 13 años, denuncian a su vez, que sus salarios no se pagan a través del sistema bancario, que son abonados en cuotas y firman recibos de dudosa legalidad. Atestiguan a su vez que la mitad de la jornada laboral es abonada “en negro” y que los últimos tres aguinaldos (julio y diciembre de 2017 y julio de 2018) les fueron “pagados” con “mercadería” para vender.

A fines del año pasado, la empresa despidió a 70 trabajadores y no les habría liquidados las indemnizaciones que les correspondían, según señalaron los voceros de los empleados que están protestando.

El sector del calzado es uno de los más afectados por la apertura de importaciones. Según denunció la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado (Uticra), según datos del INDEC, en 2017 fueron importados 34,6 millones de pares, un 25,93% más que en 2016.

Desde que asumió el gobierno del presidente Mauricio Macri, en diciembre de 2015, la industria del calzado despidió a 6 mil operarios, el 20 por ciento de un universo de 30 mil. A su vez, el sector industrial, en su conjunto, perdió el 7,4% de sus puestos de trabajo en el mismo período.

En Córdoba, el sector registró 300 despidos en 2017 y el 70% de las fábricas en la provincia presentaron suspensiones y adelantos por vacaciones, mientras que en Santa Fe hubo 150 despidos.

“Hoy en Córdoba hay 125 fábricas registradas, 90 por ciento son Pyme de hasta 12 empleados. En 2015 eran 240 empresas”, asegura Miguel Hames, presidente de la Cámara de la Industria del Calzado de Córdoba. Según el dirigente, en el mismo lapso el sector local pasó de fabricar 23 millones de pares anuales a no más de 13 millones este año.

En cuanto a las PYMES, la ENAC (Empresarios Nacionales para el Desarrollo Argentino) estima que en general sobre el nivel de actividad de las empresas industriales, que emplean entre 5 y 500 trabajadores, en promedio están al 54% de su capacidad utilizada, casi 10 puntos menos que el promedio que el INDEC midió para el mismo trimestre (64,8%) y que es sobre grandes empresas fabriles, las únicas que evalúa este índice, y un punto menos respecto del primer trimestre del 2018.

Por lo expuesto, solicito a mis pares su apoyo en este proyecto.