El Senado y Cámara de Diputados...

LEY DE ESTÍMULO PARA EL DESARROLLO DE LA

UNIVERSIDAD NACIONAL DEL COMAHUE

ARTÍCULO 1° — Establécese una asignación presupuestaria especial y extraordinaria en la suma de hasta CINCO MIL CUATROCIENTOS MILLONES (5.400.000.000) con destino a la Universidad Nacional del Comahue (UNCo), en concepto de estímulo para el desarrollo de recursos técnicos, humanos y de infraestructura, la que se denominará "Asignación Especial para el Desarrollo de la Universidad Nacional del Comahue”.

La asignación mencionada en el párrafo anterior, se fijará en la ley de Presupuesto para la Administración Pública Nacional, debiendo incluirse en el ejercicio financiero correspondiente al del año de entrada en vigencia de la presente ley, los montos necesarios requeridos para el inicio de ejecución del plan de inversiones que, a tales efectos, elaborará la Universidad Nacional del Comahue (UNCo).

Dispónese que en las cuatro leyes de Presupuesto Nacional subsiguientes al ejercicio financiero mencionado en el párrafo anterior, deberán incluirse los montos necesarios para la prosecución y finalización del plan de inversiones y obras previsto, consolidándose en cada uno los aportes del ejercicio anterior y llevar el Presupuesto dela UNCo al 85% del Presupuesto Normativo del Modelo de Pautas del CIN, que es el promedio del sistema, al cabo de los cuatro años.

El Jefe de Gabinete de Ministros efectuará las reestructuraciones presupuestarias necesarias para dar cumplimiento a las disposiciones emanadas de la presente ley.

ARTÍCULO 2º — Créase en el ámbito de la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, la Comisión Asesora para el Desarrollo de la Universidad Nacional del Comahue, la cual se constituirá dentro de los SESENTA (60) días de publicada la presente ley.

ARTÍCULO 3° — La Comisión Asesora para el Desarrollo de la Universidad Nacional del Comahue estará compuesta por:

a) El Secretario de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología;

b) El Rector de la Universidad Nacional del Comahue;

c) El Secretario de Hacienda del Ministerio de Hacienda.

ARTÍCULO 4° — La Comisión creada por el artículo 2º, funcionará un máximo de TREINTA (30) días y será presidida por el Secretario de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, plazo en el que deberá elaborar dictamen. La Comisión dictará su propio reglamento y sus componentes no percibirán remuneración ni compensación alguna.

ARTÍCULO 5° — La Comisión deberá elaborar dictamen sobre los siguientes puntos, fijando:

a) Necesidades de la UNCo derivadas del funcionamiento descentralizado, en las diferentes sedes de la universidad;

b) Necesidades de la UNCo en desarrollo de infraestructura física para la docencia e investigación;

c) Necesidades de la UNCo generadas a partir del dictado de nuevas carreras;

d) Necesidades de la UNCo para el fortalecimiento de programas y equipos de investigación;

e) La evolución histórica de los recursos presupuestarios nacionales destinados a la UNCo desde 2016.

ARTÍCULO 6°.- Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Señor presidente:

La Universidad Nacional del Comahue fue la primera universidad nacional de la Patagonia. Su condición de pionera en una zona de gran extensión geográfica y de condiciones meteorológicas desfavorables, hizo que su desarrollo siempre necesite atender múltiples necesidades y de diferente tipo. Ya desde su nacimiento en 1971, la nacionalización de la Universidad del Neuquén y los Institutos de Río Negro para conformar la UNCo, implicó una constante articulación para atender la formación de recursos humanos para el desarrollo de las diferentes zonas en las que estaba presente, atravesando incluso los fuertes embates que sufrió la universidad pública durante los años de dictadura y los gobiernos neoliberales de la democracia.

Hoy, la Universidad Nacional del Comahue cuenta con sedes a lo largo y a lo ancho de las provincias del Neuquén y Río Negro, desde Cordillera hasta el Atlántico, con presencia en 17 localidades donde se dictan 75 carreras. Posee una notable diversidad de actividades de investigación, extensión, vinculación y transferencia tecnológica como parte del sistema de innovación regional, junto con el INTA, el INTI en sus distintas localizaciones, y el INVAP, el Centro Atómico y el Instituto Balseiro radicados en San Carlos de Bariloche, entre otros, a los se agregan los institutos de ciencias y tecnología UNCo/CONICET.

La amplitud de cobertura geográfica, asegura el acceso a la universidad pública y gratuita a miles de jóvenes de la Patagonia Norte evitando la migración hacia centros urbanos del centro del país y atiende a las distintas necesidades de desarrollo profesional de acuerdo a las características de cada zona, también requiere un funcionamiento institucional con grandes niveles de descentralización, lo que impacta directamente en necesidades presupuestarias que si no son adecuadamente atendidas dificultan el funcionamiento de cada una de ellas.

Los últimos años fueron difíciles para las universidades patagónicas y en particular para la UNCo. En términos presupuestarios su participación en la distribución de recursos para gastos corrientes de las universidades nacionales habrá caído 12,34% (del 2,34% al 2,05%) si se aprobara el Proyecto de Ley de Presupuesto 2020. Esta caída implica que la UNCo termine resignando más de $1.400 millones entre 2017 y 2020 para gastos corrientes, lo que hizo que muchas áreas se desfinanciaran o no pudieran atenderse adecuadamente para toda la comunidad educativa: hay necesidades salariales y de cobertura de cargos, concursos que no pueden realizarse por falta de créditos, o investigadores autofinanciando sus actividades. Los estudiantes también lo padecen, no pudiendo contar con una actualización en las becas acorde a los tiempos económicos que corren, o el propio comedor universitario, que sólo puede atender al 70% de los platos requeridos. Todo esto agravado por el proceso inflacionario que atraviesa la Argentina.

Pero también, es importante poner en valor el sentido federal que debe tener la asignación de recursos. En el Proyecto de Presupuesto 2020, de las siete universidades que más incrementaron su participación en la distribución de fondos sólo una no es del Área Metropolitana. Y la Universidad de Buenos Aires fue la que más incrementó su participación entre todas las casas de altos estudios, triplicando a la segunda más beneficiada. La recuperación del sentido federal en la distribución de recursos es un eje fundamental para un sistema universitario pensado al servicio del desarrollo nacional justo y equitativo para cada una de las regiones del país, que potencie sus capacidades y atienda las cualidades y particularidades de cada zona donde funciona cada unidad académica. En contraposición, la UNCo ocupó el tercer lugar dentro de las que menor incremento recibieron en el período 2016-2020

No obstante, pese a las dificultades que se generan, la universidad decidió mantener inquebrantable su compromiso con la región. Fue así como se aseguró el dictado de carreras que aunque fueran marginadas del financiamiento de la Secretaría de Políticas Universitarias, las necesidades la comunidad justificaron su sostenimiento, como lo son Enfermería, Topografía, Programación web, u otras que están a la espera del financiamiento, como la Licenciatura en Economía.

De igual manera, la UNCo sostuvo obras de infraestructura que amenazaban quedar inconclusas, como la Biblioteca Central o los módulos de aulas en Bariloche, Cipolletti, y Neuquén, por las que hoy todavía el Tesoro Nacional no transfirió los fondos correspondientes.

La complejidad de la situación edilicia merece un párrafo aparte. A diferencia del resto de las universidades nacionales, Comahue posee un nivel de descentralización inédito, lo que permite la presencia de educación universitaria en una amplia región, pero también insume un esfuerzo muy grande para su mantenimiento y el aprovechamiento de los recursos disponibles, atendiendo también a condiciones climatológicas y, en algunos casos geográficas, desfavorables.

Así es como, en el último tiempo, la UNCo acumuló infructuosas solicitudes para atender a varias demandas de infraestructura que no se limitan a un campus específico o área geográfica puntual: existe al día de hoy una necesidad imperiosa de asistir con obras de diferente envergadura a sedes en Bariloche, Cinco Saltos, Cipolletti, General Roca, Neuquén, San Antonio, Villa Regina y Zapala, que van desde baños y aulas hasta laboratorios o bibliotecas. Como caso paradigmático puede destacarse que la Universidad Nacional del Comahue, a pocos kilómetros de Vaca Muerta. tenga desfinanciada la construcción del edificio para Ingeniería en Petróleo.

El actual déficit de infraestructura que sufre nuestra casa de altos estudios es de más de $1.500 millones.

La concreción de estas obras de infraestructura requiere también de una asistencia extraordinaria para el mantenimiento integral de todo el sistema de sedes y subsedes que, por la dispersión territorial que poseen, hace que varios gastos corrientes tengan un costo superior al de la media de cualquier universidad. De igual manera, el fuerte incremento de las tarifas de servicios públicos también tuvo un duro impacto en las arcas de la universidad.

La caída presupuestaria de los últimos años sume a la UNCo en la postergación en tiempos de la economía del conocimiento y en tiempos en los que se expresan múltiples demandas sociales, juveniles, familiares e institucionales, vinculadas a la producción y el trabajo, la ecología, el medio ambiente, las culturas originarias, el vulcanismo, la biología marina, el petróleo, la geología y la electrónica, la actividad forestal, la ganadería, fruticultura y la industria, el turismo, las ciencias del hombre, entre otras. Vale decir, un conjunto diverso de formaciones y de capacidades científicas y tecnológicas de grado y postgrado, que constituyen un gran capital para el territorio patagónico y para dotar de recursos cognitivos a la población y las instituciones.

Por eso, con el recurrente desfinanciamiento, tanto en infraestructura como en fondos para gastos corrientes que sufrió la UNCo, sumado al crecimiento de la universidad, y el particular impacto que tiene en la Patagonia la crisis económica que atraviesa la Argentina, hacen que sea indispensable el otorgamiento de una asignación presupuestaria extraordinaria que le permita volver a tener un funcionamiento óptimo para todos sus docentes y estudiantes, sean desde Bariloche a Zapala y desde San Antonio a Neuquén.

Por esos motivos, solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto.