La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Expresamos nuestro profundo repudio y preocupación por la represión y detenciones ilegales a las que el gobierno del presidente Ortega somete al pueblo nicaragüense, desde el pasado mes de abril, que ya han producido 295 muertos y más de 800 heridos.

Solidarizarnos con el sufrimiento del pueblo nicaragüense y con la tarea que viene cumpliendo la CIDH de la Organización de Estados Americanos para que el gobierno restablezca la vigencia de los derechos humanos en el país.

Señor presidente:

Como es de conocimiento de toda la comunidad internacional, desde el pasado 18 de abril se producen en Nicaragua las protestas de su población contra Ortega y Murillo, que tuvieron su origen en el intento de reformar el sistema de seguridad social del país, y que han trocado en la exigencia de la renuncia del presidente, acusado de abuso de poder, conculcación de los derechos humanos y corrupción, luego de once años en el poder.

La CIDH de la OEA intentó, al igual que con el régimen de Maduro en la República Bolivariana de Venezuela, que el gobierno cesara en la brutal represión que llevó a que de 76 muertos verificados durante la visita de la CIDH a Nicaragua a finales de mayo se pasara a 212 a mediados de junio, a 264 a principios de julio y a 295 al día 24 de julio. Esta grave situación de violación de derechos se completa con las detenciones ilegales de cientos de ciudadanos y con el uso de las fuerzas de seguridad para “reprimir, matar, provocar lesiones y detenciones a arbitrarias” según las declaraciones del Secretario Ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrão.

La situación en Nicaragua fue calificada como “genocidio” por el Secretario de Estado de los Estados Unidos de América. La alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini, llamó al Gobierno nicaragüense a poner “fin inmediato a la violencia”. Brasil elevó una protesta formal contra el gobierno por la muerte de la ciudadana de ese país, Rayneia Gabrielle Lima, estudiante de Medicina y residente en Managua.

Toda la comunidad internacional ha expresado su condena a la situación y requerido del gobierno el adelantamiento de las elecciones. En nuestra región más de 13 países han declarado su repudio a la represión en ciudades como Masaya, y los ataques a la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN).

Este H. Congreso no puede estar ausente de las voces que reclaman en nombre del pueblo nicaragüense, por ello es que solicito a los señores diputados que acompañen este proyecto.