PROYECTO DE TP


Expediente 3036-D-2018
Sumario: EXPRESAR BENEPLACITO POR EL NATALICIO DE MONSEÑOR ALBERTO DEVOTO, PRIMER OBISPO DE GOYA, PROVINCIA DE CORRIENTES, CONOCIDO COMO "EL APOSTOL DE LOS POBRES".
Fecha: 17/05/2018
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 50
Proyecto
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:


Expresar su beneplácito al cumplirse este 17 de Mayo de 2018 el centenario del natalicio de Mons. Alberto Devoto, primer obispo de Goya, provincia de Corrientes, conocido como “el apóstol de los pobres”.

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


Alberto Pascual Devoto nació en Buenos Aires un 17 de mayo de 1918, y falleció en Goya, Provincia de Corrientes, un 28 de julio de 1984. Fue conocido como "el apóstol de los pobres", y se convirtió en el primer obispo de Goya.
Alberto fue un líder popular que marcó a fuego la historia del sur de la provincia de Corrientes. Sacerdote y obispo, fue sobre todo un profundo dinamizador de la sociedad y la cultura de la diócesis que Juan XXIII le creara para que con sus jóvenes cuarenta años pudiera formar parte del Concilio Vaticano II.
Los campesinos lo recuerdan porque en esos años tuvo el coraje de organizar la Acción Católica Rural, dar empuje al existente Movimiento Rural y, a partir de ahí, se dio el surgimiento de las Ligas Agrarias Correntinas. Lograron la unidad del campesinado que era subyugado por las tabacaleras multinacionales quienes declaraban un precio general del tabaco cercano a su precio internacional, pero a través de subclasificaciones tiraban a un treinta o a veces un veinticinco por ciento del valor al producto que una vez llegado a barracas ya no podía devolverse y se vendía a cualquier precio. Fue tal la fortaleza de ese movimiento, que el dictador Lanusse personalmente se vio obligado a ir a la Plaza de Santa Lucía donde el campesinado le exigió una serie de puntos. Lanusse bajó en el aeropuerto de Goya y en la municipalidad de esa ciudad recibió a los líderes de las Ligas. Pero al frente y como garante de la seguridad de los mismos, los campesinos le pidieron que estuviera Mons. Devoto. Precio unificado del tabaco (una sola categoría) y veinticinco tractores fue lo que lograron esos hombres rudos y de escasa escolarización… pero no ya ignorantes de sus derechos y posibilidades.
Los docentes, los líderes sindicales y políticos lo recuerdan con gran admiración, ya que con gran esfuerzo lograron fundar el Instituto del Profesorado Estrada con su “Cátedra Libre de Filosofía” por donde pasaran figuras de la política nacional con nombres como el de Balbín o un joven Raúl Alfonsín. La gran mayoría de los detenidos y desaparecidos de la zona de Goya fueron docentes formados en este Instituto donde se cometía el grave pecado de enseñarles a pensar y sobre todo a argumentar la opinión.
Fue firmante del Pacto de las Catacumbas donde 18 obispos de todo el mundo, como únicos representantes por América Latina junto con Mons. Helder Cámara de Brasil. Allí se comprometieron a trabajar “con los pobres, desde los pobres y para los pobres”. Eso originó el Manifiesto de Sacerdotes del Tercer Mundo desde donde luego fueron mutando y ramificándose en la Teología de la Liberación, Teología del Pueblo, y continuado hoy por los Curas de Opción por los Pobres y el Equipo de Curas Villeros, acompañados por el argentino más importante de la historia: el Papa Francisco.
Hoy no sólo es necesario homenajearlo, sino que debemos bucear en los motivos más profundos de su tarea de promoción humana y social. En él se unen lo mejor de la fe, esa capacidad de creer contra toda esperanza, esa terca perseverancia del que cree y espera, y esa capacidad política de los líderes populares que saben leer “los signos de la historia”.
Hoy necesitamos su profundidad de análisis, su seguridad en los métodos elegidos para enfrentar los desafíos del presente sin desesperarnos, pero sobre todo para no “apurar la historia”, para sostener la inconmovible fuerza de las metodologías no violentas de lucha y de construcción política, pero sobre todo para no perder de vista el “sujeto histórico” por el que trabajamos, pero el real y concreto que nos interpela cada día, con sus contradicciones, con sus elecciones, con sus pobrezas.
Alberto Devoto vive. Vive en el pueblo campesino. Vive en los sobrevivientes y exiliados de la última dictadura. Vive en Ramón Orlando Mendoza, quien de niño recibiera un chupetín, que para él se volvió inolvidable, de las manos de este peladito, el mismo que se la tendió cuando regresó de Malvinas. Vive en los inundados que rezan para que baje el agua, pero se olvidan de agradecer cuando se va la inundación. Ellos lo recuerdan recorriendo en lancha las zonas y cambiando su residencia cómoda del centro por un ranchito en la costa del rio entre pescadores. Ese ranchito en el que un marxista como el Dr. Rossembaun que fue a atenderlo, manifestó: “este hombre es un santo o un loco, tiene una cama, una mesa y dos sillas, nada más”.
Hoy, a cien años de su nacimiento, queremos expresar un beneplácito por su vida siempre junto a los más necesitados, luchando contra la injusticia, con los pobres, desde los pobres y para los pobres.
Por todo lo expuesto, solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
RUIZ ARAGON, JOSE ARNALDO CORRIENTES FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
RELACIONES EXTERIORES Y CULTO (Primera Competencia)