El Senado y Cámara de Diputados...

Feriado Nacional 8 de marzo “Día Internacional de la Mujer”

EL SENADO Y CÁMARA DE DIPUTADOS

DE LA NACIÓN ARGENTINA, REUNIDOS EN CONGRESO, ETC.

SANCIONAN CON FUERZA DE LEY:

Artículo 1°: Establézcase el 8 de marzo de cada año en conmemoración del “Día Internacional de la Mujer”, como feriado nacional para las mujeres, no trasladable.

Artículo 2°: El Poder Ejecutivo, a través de sus organismos pertinentes, desarrollará en torno a esta fecha conmemorativa una agenda pública y participativa cuyo objetivo será la reflexión consciente acerca de la situación social de las mujeres, la imperiosa y urgente necesidad de revertir comunitaria y culturalmente la vulneración de sus derechos y las desigualdades a las que son sometidas.

Artículo 3°: Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Señor presidente:

Sr Presidente:

Este año, la conmemoración del Día Internacional de la Mujer llega de la mano de un movimiento mundial sin precedentes por los derechos, la igualdad y la justicia de las mujeres. El acoso sexual, la violencia y la discriminación contra las mujeres han acaparado la atención de todos.

Y el discurso público interpela inexorablemente a la ciudadanía, sus representantes y a los líderes formadores de opinión a esgrimir postura y coordinar acciones respecto a estas problemáticas. Es esa interpelación la raíz de esta iniciativa.

Nuestra sociedad ha experimentado un sensible cambio en sus pautas valorativas y ha adquirido mayor conciencia sobre la importancia del respeto a los derechos humanos y particularmente a los derechos de las mujeres. Este proceso ha quedado plasmado en diversos artículos de la Constitución Nacional reformada en el año 1994, de los cuales cabe destacar el artículo 37 que contiene la garantía del pleno ejercicio de los derechos políticos mediante la igualdad real de oportunidades entre varones y mujeres para el acceso a cargos electivos y partidarios mediante acciones positivas en la regulación de los partidos políticos y el régimen electoral.; y también el artículo 75 inc. 22), que enumera los tratados internacionales y declaraciones de derechos humanos que gozan de jerarquía constitucional. Entre ellos, la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) Consenso de Quito (2007) Firmado por 34 países, entre ellos la Argentina, durante la Décima Conferencia Regional sobre la Mujer de América latina y el Caribe. Entre otras cosas, el acuerdo firmado señala la necesidad de adoptar las medidas necesarias para que los Estados asuman el cuidado y el bienestar de la población como objetivo de la economía, cuya responsabilidad pública es innegable.

En nuestro ordenamiento legal nacional también hemos tenido avances en la materia, expresados fundamentalmente en la Ley de Contrato de Trabajo. Entre ellos el principio de prohibición de hacer discriminaciones (Art. 17 LCT), el reconocimiento de la plena capacidad de la mujer para realizar todo tipo de contratos (Art. 172 LCT). El reconocimiento de la promoción profesional y la formación en el trabajo en condiciones igualitarias de acceso y trato como derecho fundamental de los trabajadores y las trabajadoras, (Cap. “De la Formación Profesional” LCT), la igualdad de remuneración entre la mano de obra masculina y femenina por un trabajo de igual valor (Art. 172 LCT)., el descanso intermedio por horarios discontinuos (Art.174 LCT), la prohibición de encargar la ejecución de trabajos a domicilio a mujeres ocupadas en dependencias de la empresa a fin de evitar violaciones a las limitaciones de la jornada de trabajo (Art.175 LCT), la prohibición de ocupar a mujeres en trabajos penosos, peligrosos o insalubres (Art.176 LCT), la protección a la maternidad (Art. 177 a 179 LCT) y finalmente la Ley de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales (Ley N° 26.485).

Por otro lado, ejemplos claros son los movimientos “Ni una Menos” en nuestro país, contra el femicidio y la violencia de género; “Me Too” en Estados Unidos contra el acoso sexual y la violencia; “Quella Volta Che” en Italia; “Balance Ton Porc” en Francia; “Ana_Kaman” en los Estados Árabes, y tantas otras iniciativas que abordan cuestiones que incluyen desde la igualdad salarial hasta la representación política de las mujeres.

Estas expresiones correspondientes a un momento político de inflexión histórica son resultantes de casi un siglo de lucha en pos de la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo.

La idea de un día internacional de la mujer surgió al final del siglo XIX, en el contexto de un mundo industrializado, un período de expansión y turbulencia económica, crecimiento demográfico e ideologías radicales.

En 1910 la Internacional Socialista, organización internacional de partidos políticos demócratas, socialistas y de trabajadores, reunida entonces en Copenhague, proclamó el día de la Mujer, de carácter internacional, como homenaje al movimiento en favor de los derechos de la mujer y para contribuir a la gesta del sufragio femenino universal. La propuesta fue aprobada unánimemente por más de 100 mujeres provenientes de 17 países, entre ellas las tres primeras mujeres elegidas para el parlamento finlandés.

Posteriormente, el 19 de marzo de 1911 el día de la mujer se celebró por primera vez en Alemania, Austria, Dinamarca, y Suiza, con mítines a los que asistieron más de un millón de personas. Además del derecho al voto y de ocupar cargos públicos, exigieron derecho al trabajo, la formación profesional y a la no discriminación laboral.

En 1913 en el marco de los movimientos en pro de la paz que surgieron en vísperas de la primera guerra mundial, las mujeres rusas lo celebraron el último domingo de febrero.

En 1914 en el resto de Europa, Mujeres de todo el continente coordinaron acciones de lucha política en torno al 8 de marzo para protestar por la guerra.

En 1917, en la primera Guerra Mundial como reacción ante la muerte de dos millones de soldados de su país, las mujeres rusas escogieron nuevamente el último domingo de febrero para declararse en huelga en demanda de “pan y paz”. Cuatro días después, el Zar se vio obligado a abdicar y el gobierno provisional concedió a las mujeres el derecho de voto. Es así que el 23 de febrero se conmemora, según el calendario juliano ruso, al igual que el 8 de marzo, según el calendario gregoriano en otros países, entre ellos el nuestro.

En 1975 las Naciones Unidas conmemoraron por primera vez el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, en consonancia con el Año Internacional de la Mujer también instituido por la ONU, en homenaje a las luchas del género por la conquista de derechos.

Por tantos años de lucha, declarar Feriado Nacional el 8 de marzo es una buena oportunidad para reconocer a quienes lucharon y trabajan sin descanso para reivindicar los derechos de las mujeres, su participación en los espacios de poder y decisión y su desarrollo íntegro para conseguir su pleno potencial.

En nuestro país el otorgamiento de derechos políticos al género femenino es tan reciente que hace de aquello apenas poco más de setenta años.

Su emblema fue la sanción y la promulgación de la Ley 13.010 de voto femenino, de 1947, por la que trabajó arduamente Eva Duarte de Perón. Recién en 1951 fueron las mujeres de nuestro país incorporadas al padrón electoral y partícipes de las candidaturas para ocupar cargos públicos, hecho histórico a través del cual casi cuatro millones de ciudadanas comenzaban a serlo plenamente.

La presente se trata de una iniciativa que viene a dar cumplimiento a una necesidad de garantizar la participación de las mujeres en las diferentes actividades que se generan en el marco de las jornadas de lucha, reflexión y manifestación por la igualdad de derechos, trato y oportunidades. La iniciativa se relaciona directamente con el Paro Mundial de Mujeres impulsado desde Argentina y secundado en 70 países al grito de "nos queremos vivas", que se llevó a cabo el pasado 8 de marzo de 2017. El movimiento de mujeres ha tomado la iniciativa en la organización de diferentes actividades para esta fecha, consolidando diferentes redes de trabajo y articulación para garantizar el paro de mujeres y la asistencia a las diversas actividades, sinembargo las posibilidades de participación de todas las mujeres en esta jornada se ve obstaculizada por decisiones en diferentes ámbitos, que impiden la participación de las mujeres en la jornada.

El 8 de marzo es un día para reflexionar, celebrar los logros, concientizar, tomar medidas y transformar la vida de las mujeres.

Por lo expuesto, solicito a los señores Diputados me acompañen con la aprobación de la presente iniciativa.