POBLACION Y DESARROLLO HUMANO
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PROYECTO DE DECLARACION
Expediente: 4006-D-2008
Sumario: EXPRESAR BENEPLACITO, EN EL MARCO RECORDATORIO DEL 84 ANIVERSARIO DE LA MASACRE DE NAPALPI, POR LA PUESTA EN MARCHA DE OBRAS EN LA LOCALIDAD DE COLONIA ABORIGEN, PROVINCIA DEL CHACO.
Fecha: 25/07/2008
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 94
	        Expresar su 
beneplácito  en el marco del recordatorio del 84 aniversario 
de la masacre de Napalpí, la puesta en marcha de obras de 
infraestructuras, en la localidad de Colonia Aborigen, 
provincia del Chaco.
	          
      
  
 
					FUNDAMENTOS
Señor presidente:
	        Señor 
Presidente, el Gobierno de la provincia del Chaco, a través 
de su Gobernador Jorge Capitanich pidió perdón a los 
pueblos originarios en nombre del gobierno, a las víctimas 
y a los descendientes, tras 84 años de la masacre de 
Napalpi.
	        
	        
	        Señor 
Presidente, las obras tienen como fin reivindicar al pueblo 
de la localidad de Colonia Aborigen, brindándole 
herramientas necesarias para el crecimiento propio.
	        
	        
	        La reparación 
histórica, a los pueblos aborígenes, incluye la ejecución de 
obras de importancia, así es que se proyecta la creación un 
acueducto que traiga agua potable para toda la población 
desde Napalpí a Colonia Aborigen.
	        
	        
	        Señor 
Presidente, debemos remarcar que por primera vez, se 
designó a 128 agentes sanitarios bilingües aborígenes, la  
educación intercultural  y próximamente se va a empezar a 
construir el nuevo centro asistencial de Villa Río Bermejito, 
además la creación de 30 nuevos Centros de Integración 
Comunitaria.
	        
	        
	        Además, 
Señor Presidente, en la Colonia Napalpí, a 9 kilómetros de 
Machagai, se inauguró la remodelación y refacción de la 
EGB 212, que festejó sus Bodas de Diamante.
	        
	        
	        Es importante destacar 
que si bien en el calendario escolar aparece desde el año 2007, 
recién a partir de este año se incluye el día de la masacre (19 de 
julio de 1924) con la modalidad de acto forma II, y como acto forma 
III la semana que lo precede. Centralmente es la conmemoración de 
la represión desatada por la policía del Territorio Nacional del 
Chaco en las cercanías de El Aguará -hoy Colonia Aborigen- contra 
un grupo de chaqueños trabajadores del algodón, pertenecientes a 
las etnias aborígenes Mocoi, Qom, Shinpi', y algunos criollos 
correntinos y santiagueños residentes en la zona.
	        
	        
	        Señor Presidente,esta 
"nueva efeméride" se encuentra enmarcada en la Ley provincial Nº 
5611 del año 2005, es decir, no es "nuevo" lo que se conmemora. 
Los hechos ocurridos en el Aguará en julio de 1924 son reconocidos 
más tarde como "Masacre de Napalpi", y encontramos en cuanto a 
ellos -aparte de silencios- miradas opuestas.  
Una - desde el oficialismo del gobierno de la época y en la 
historiografía tradicional- es la que niega el carácter de masacre 
para titular dichos hechos como sublevación o insurrección, o "el 
último malón", desde la cual se justificaba la actuación policial para 
defender a las poblaciones cercanas. Según esta versión, las 
personas muertas fueron resultado del enfrentamiento inevitable 
para mantener "la paz" del territorio. 
Las otras visiones, dan cuenta de la una cruenta represión de 
nuestra historia chaqueña a trabajadores del algodón, ejercida por 
el gobierno del Territorio a fin de defender los intereses de 
empresas y terratenientes de la pujante producción algodonera. 
Esta conmemoración está reglamentada oficialmente en el 
calendario escolar por Resolución N. 054/08. También su desarrollo 
en la escuela y en el salón se puede fundamentar desde la Ley de 
Educación Nacional 26.206 en viarios de sus artículos:  
Art. 11 inciso ñ) en donde se lee: "Asegurar a los pueblos indígenas 
el respeto a su lengua y a su identidad cultural, promoviendo la 
valoración de la multiculturalidad en la formación de todos/as los/as 
educandos/as";  
Art. 54 "El Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología, en 
acuerdo con el Consejo Federal de Educación, definirá contenidos 
curriculares comunes que promuevan el respeto por la 
multiculturalidad y el conocimiento de las culturas originarias en 
todas las escuelas del país, permitiendo a los/as alumnos/as valorar 
y comprender la diversidad cultural como atributo positivo
	        
	        
	        de nuestra sociedad." 
Art. 92 inciso e- "Formarán parte de los contenidos curriculares
	        
	        
	        comunes a todas las 
jurisdicciones: e) El conocimiento de la
	        
	        
	        diversidad cultural de los 
pueblos indígenas y sus derechos, en concordancia con el artículo 
54 de la presente ley."
	        
	        
	        Finalmente, como 
culminación de un proceso de fortalecimiento de la conciencia 
histórica, y reconstrucción de la memoria colectiva, por primera vez 
en la historia de la provincia, un gobernador visitó el lugar donde 
fueron depositados los cuatrocientos cadáveres que fueron 
asesinados en la Masacre de Napalpí.  
	        
	        
	        Es menester 
destacar, Señor Presidente, que se estableció el 
fortalecimiento del Instituto del Aborigen Chaqueño IDACH 
y  el compromiso del gobierno del aumento presupuestario 
de diez millones de pesos para su mejor desarrollo y 
autonomía.   
 
Cabe mencionar, Señor Presidente, que el 19 de julio de 
1924, por una orden del Gobernador chaqueño Fernando 
Centeno, la policía rodeó la Reducción Aborigen de Napalpí, 
de población toba y mocoví. 
	        
	        
	         
Los asesinados fueron, según diversas fuentes, más de 200 
aborígenes que se negaban a seguir siendo explotados, que 
reclamaban una paga justa para cosechar el algodón de los 
grandes terratenientes y para justificar la matanza se 
esgrimió "sublevación indígena".  
 
En 1895 la superficie sembrada de algodón en el Chaco era 
de sólo 100 hectáreas. Pero el precio internacional ascendía 
y los campos del norte comenzaron a inundarse de capullos 
blancos donde trabajaban jornadas eternas miles de 
hombres de piel oscura. En 1923 los sembradíos chaqueños 
de algodón ya alcanzaban las 50.000 hectáreas. Pero 
también debían multiplicarse los brazos que recojan el "oro 
blanco".  
 
El 12 de octubre de 1922, el radical Marcelo T. de Alvear 
había reemplazado en la presidencia a Hipólito Yrigoyen y el 
Territorio Nacional del Chaco ya se perfilaba como el primer 
productor nacional de algodón. Pero en julio de 1924 los 
pobladores originarios toba y mocoví de la Reducción 
Aborigen de Napalpí a 120 kilómetros de 
	        
	        
	        Resistencia se 
declararon en huelga: denunciaban los maltratos, la 
explotación de los terratenientes. Los ingenios de Salta y 
Jujuy ofrecieron mejor paga. Hacía allá intentaron ir los 
pobladores, pero el gobernador Centeno prohibió a los 
indígenas abandonar el Chaco. El indio no podía trabajar su 
propia tierra, su única alternativa era seguir cosechando 
como esclavo, pero igual se resistía. El 18 de julio, y con la 
excusa de un supuesto malón indígena, Centeno dio la 
orden.  
 
A la mañana del 19 de julio, 130 policías y algunos civiles 
partieron desde la localidad de Quitilipi hasta Napalpí. 
Después de 45 minutos de disparar los Winchester y 
Máuser a todo lo que se movía, hubo silencio y humareda 
de los fusiles. Los heridos -fueran hombres, mujeres o 
niños- fueron asesinados a machetazos. El periódico 
Heraldo del Norte recordó, a finales de la década del 20, el 
hecho: "Como a las nueve, y sin que los inocentes 
indígenas hicieran un sólo disparo, hicieron repetidas 
descargas cerradas y enseguida, en medio del pánico de los 
indios (más mujeres y niños que hombres), atacaron. Se 
produjo entonces la más cobarde y feroz carnicería, 
degollando a los heridos sin respetar sexo ni edad".  
 
El 29 de agosto --cuarenta días después de la matanza--, el 
ex director de la Reducción de Napalpí Enrique Lynch 
Arribálzaga escribió una carta que fue leída en el Congreso 
Nacional: "La matanza de indígenas por la policía del Chaco 
continúa en Napalpí y sus alrededores; parece que los 
criminales se hubieran propuesto eliminar a todos los que 
se hallaron presente en la carnicería del 19 de julio, para 
que no puedan servir de testigos si viene la Comisión 
Investigadora de la Cámara de Diputados".  
 
En el libro "Memorias del Gran Chaco", de la historiadora 
Mercedes Silva, se confirma el hecho y cuenta que el 
mocoví Pedro Maidana, uno de los líderes de la huelga, 
corrió esa suerte. "Se lo mató en forma salvaje y se le 
extirparon los testículos y una oreja para exhibirlos como 
trofeo de batalla", asegura.  
 
En el libro "Napalpí, la herida abierta", el periodista Vidal 
Mario detalla: "El ataque terminó en una matanza, en la 
más horrenda masacre que recuerda la historia de las 
culturas indígenas en el presente siglo. Los atacantes sólo 
cesaron de disparar cuando advirtieron que en los toldos no 
quedaba un indio que no estuviera muerto o herido. Los 
heridos fueron degollados, algunos colgados. Entre 
hombres, mujeres y niños fueron muertos alrededor de 
doscientos aborígenes y algunos campesinos blancos que 
también se habían plegado al movimiento huelguista".  
 
Un reciente microprograma de la Red de Comunicación 
Indígena destaca: "Se dispararon más de 5000 tiros y la 
orgía de sangre incluyó la extracción de testículos, penes y 
orejas de los muertos, esos tristes trofeos fueron exhibidos 
en la comisaría de Quitilipi. Algunos muertos fueron 
enterrados en fosas comunes, otros fueron quemados". En 
el mismo audio, el cacique toba Esteban Moreno, contó la 
historia que es transmitida de generación en generación. 
"En las tolderías aparecieron soldados y un avión que 
ametrallaba. Los mataron porque se negaban a cosechar. 
Nos dimos cuenta que fue una matanza porque sólo 
murieron aborígenes, tobas y mocovíes, no hay soldados 
heridos, no fue lucha, fue masacre, fue matanza, por eso 
ahora ese lugar se llama Colonia La Matanza".  
 
La Reducción de Napalpí -palabra toba que significa lugar 
de los muertos- había sido fundada en 1911, en el corazón 
del Territorio Nacional del Chaco. Las primeras familias que 
se instalaron eran de las etnias Pilagá, Abipón, Toba, 
Charrúa y Mocoví. El corresponsal del diario La Razón, 
Federico Gutiérrez, escribió en julio de 1924: "Muchas 
hectáreas de tierra flor están en poder los pobres indios, 
quitarles esas tierras es la ilusión que muchos desean en 
secreto".  
 
Napalpí no fue una matanza aislada, sino una práctica 
recurrente del poder político y los terratenientes --con la 
mano de obra policial o militar-- para privar a los 
	        
	        
	        pobladores 
originarios de su forma ancestral de vida e introducirlos por 
la fuerza al sistema de producción. Todos los historiadores 
revisionistas coinciden en esa mirada y, en el libro "La 
violencia como potencia económica: Chaco 1870-1940", 
Nicolás Iñigo Carrera afirma: "Los aborígenes de la zona 
chaqueña vivían sin la necesidad de pertenecer al mercado 
capitalista. La violencia ejercida hacia ellos, por la vía 
política con la represión y por la vía económica tuvo como 
objetivo eliminar sus formas de producción y convertirlos 
en sujetos sometidos al mercado".  
 
"Se comenzó a privar a los indígenas de sus condiciones 
materiales de existencia. Se inició así un proceso que los 
convertía en obreros obligados a vender su fuerza de 
trabajo para poder subsistir, premisa necesaria para la 
exitencia de capital. Un modo de vivir había sido destruido", 
destaca Iñigo Carrera en su libro.  
 
Además de someterlos, el Gobierno quería ampliar los 
cultivos, dar tierra a grandes terratenientes y concentrar a 
los indígenas en reservas. Siempre la versión oficial, 
"civilizadora y cristiana", hablaba de malones o 
enfrentamientos despiadados. Pero los muertos siempre 
eran pobladores originarios. Sobre los imaginarios 
combates, el historiador Alberto Luis Noblía remarcó que 
"las naciones aborígenes chaqueñas no practicaron el 
malón, usual en otros pueblos. Todo lo contrario, los 
inmigrantes llegados de Europa nunca fueron perseguidos 
por los entonces dueños de las tierras. Al contrario, el 
colono supo encontrar en el indígena mano de obra barata". 
(1) 
	        
	        
	         
Por todo lo expuesto, solicito a mis pares la aprobación del 
presente proyecto de declaración.
	        
	        
	         
(1) En 2006, el senador Jorge Milton Capitanich, presentó 
un proyecto de declaración "adhiriendo a la conmemoración 
del aniversario de la matanza en la Reducción Aborigen de 
Napalpí, a celebrarse el 19 de julio"( Esta declaración fue 
aprobada en Cámara de Senadores en noviembre de ese 
mismo año).  
	        
	        
	        2) 
SILVA, Mercedes. Memorias del Gran Chaco. E.I.M. Ediciones 
Nuestra Cultura. Resistencia. 1998. Pág. 121
	          
      
  
 
					
  | Firmante | Distrito | Bloque | 
|---|---|---|
| DAMILANO GRIVARELLO, VIVIANA MONICA | CHACO | FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ | 
Giro a comisiones en Diputados
					| Comisión | 
|---|
| POBLACION Y DESARROLLO HUMANO (Primera Competencia) | 
Trámite en comisión(Cámara de Diputados)
					| Fecha | Movimiento | Resultado | 
|---|---|---|
| 19/11/2008 | DICTAMEN | Aprobado por unanimidad con modificaciones | 
Dictamen
					| Cámara | Dictamen | Texto | Fecha | 
|---|---|---|---|
| Diputados | Orden del Dia 1449/2008 | CON MODIFICACIONES | 09/12/2008 | 
 Trámite 
 
							| Cámara | Movimiento | Fecha | Resultado | 
|---|---|---|---|
| Diputados | CONSIDERACION Y APROBACION | APROBADO | 
