EXPRESAR PREOCUPACION POR LAS MANIFESTACIONES PUBLICAS DEL SECRETARIO DE ESTADO DE MINERÍA DE LA NACION, JORGE MAYORAL, QUE OFENDEN A LOS CATAMARQUEÑOS QUE PIENSAN DIFERENTE.

Señor presidente:

En un ejemplo acabado de lo que un funcionario público no debe hacer, el secretario de Minería Jorge Mayoral dio muestras de elevada soberbia y desatención de los problemas planteados desde el interior, en este caso de nuestra provincia de Catamarca.

Durante un discurso ofrecido en la localidad de Londres, departamento Belén, Mayoral defendió la política nacional en materia de retenciones mineras, ante la cual nuestra provincia se manifestó preocupada por los eventuales perjuicios que podría ocasionar a nuestra economía con vistas a cumplir con los ansiados sueños de desarrollo sustentable de los catamarqueños.

En su discurso, reflejado por el diario El Ancasti el 25 de junio pasado, Mayoral calificó a quienes se oponen a las intenciones oficiales por instaurar una "estrategia del hijiputismo" y que "en la política de Catamarca no había un proyecto minero". La obvia molestia que generaron estas y otras expresiones, obligaron a los organizadores de un acto público a suspenderlo.

No contento con esta repudiable actitud, el funcionario, en un intento por aclarar sus afirmaciones, agregó horas después más leña al fuego al señalar expresamente al gobernador Eduardo Brizuela del Moral como un "pobre gobernador", por desconocer determinadas estadísticas de la actividad minera en la provincia.

En declaraciones publicada por el Diario de Cuyo, Mayoral expresó: "Decía Perón, 'la única verdad es la realidad'. Lo invito al Gobernador a que repase los números, que pobre Gobernador, no conoce; de las perforaciones realizadas en su provincia. Me pregunto si el Gobernador cree que con 28 mil metros de perforación va a sostener el crecimiento estratégico del desarrollo de esa actividad! Creo que es imposible. Y me pregunto: ¿el Gobernador Brizuela del Moral cuántos períodos ha sido reelegido? No he tenido oportunidad de cortar ninguna cinta de inauguración de proyectos con el Gobernador", indicó Mayoral.

Esta actitud reiterativa de Mayoral, de agredir a través de diatribas y falacias, nos obliga a realizar ciertas apreciaciones en defensa de la dignidad de las reivindicaciones de nuestra provincia.

Sostenemos que el tratamiento de la riqueza minera, a partir de las condiciones favorables para la inversión que generó en parte Catamarca a través de una política de Estado que ya tiene más de una década, requiere sin dudas del compromiso conjunto de la Nación, acompañando permanentemente las iniciativas para que la minería se traduzca en desarrollo sustentable.

La explotación de los recursos naturales, en este caso las riquezas metalíferas, es una oportunidad única, donde otro tipo de actividad productiva, como la agricultura o la ganadería, no tienen condiciones altamente favorables. Con un 80 por ciento de nuestra superficie constituida por montañas, sostenemos a la minería como política de desarrollo central para el futuro de Catamarca.

En ese marco, creemos que la tarea conjunta debe hacerse con compromiso y respeto, porque está en juego la esperanza, de los catamarqueños.

Por eso sostenemos que la política minera nacional aún debe darnos más respuestas que agravios, más certezas que insultos y más propuestas que actitudes contrarias a la vigencia del federalismo.

Hemos argumentado que el gobierno nacional, al momento de aplicar el esquema de retenciones a las exportaciones mineras, debió haber coordinado de inmediato políticas concretas donde se explota esta riqueza para que esos fondos vuelvan en obras para el desarrollo.

Las retenciones o derechos de exportación no son copartipables de acuerdo a los marcos legales vigentes y en ese marco hemos propuesto públicamente que se trabaje en ello. Lo contrario sería profundizar los "criterios de caja" de algunos funcionarios, quienes concentran los fondos generados en las provincias y no lo aplican en beneficio del desarrollo sustentable de las regiones mineras.

Cabe citar números oficiales. En la práctica, la minería de Catamarca aportó durante el 2007 alrededor de 1.350 millones de pesos solamente en impuestos a las ganancias, lo que comparado a la exigua regalías mineras que percibe de manera directa (127 millones de pesos en el mismo año) habla a las claras sobre la necesidad de compensar a la provincia con políticas directas y federales.

Estas afirmaciones fueron interpretadas en forma paranoica, como una crítica despiadada, cuando en realidad planteamos un debate serio y responsable para llevar soluciones concretas a quienes representamos.

Las declaraciones de Mayoral confirman que no alcanzó la mayoría de edad necesaria para ser funcionario de un alto cargo que la Nación, y las provincias mineras necesitan una expresión adecuada de esta necesaria relación para continuar con el desarrollo minero.

Nuestro gobernador ha demostrado permanentemente su vocación de aunar y coordinar criterios con la Nación para desarrollar estrategias concretas para que no sólo permitan el desarrollo, sino que los propios pobladores se comprometan con esta política de Estado.

Por todo lo expuesto solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto.