LEGISLACION PENAL
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PROYECTO DE RESOLUCION
Expediente: 5821-D-2010
Sumario: EXPRESAR PREOCUPACION POR LA INSEGURIDAD QUE AZOTA AL PAIS QUE SE COBRO LA VIDA DE DIEGO D'ANDREIS, CONVIRTIENDOSE EN EL SEPTIMO CRIMEN CONTRA UN MIEMBRO DE LA POLICIA FEDERAL.
Fecha: 11/08/2010
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 110
Expresar
preocupación por la inseguridad que azota al país y que se cobro
la vida de Diego D´Andreis, el joven de 22 años asesinado frente a
su familia por el solo hecho de vestir un uniforme policial,
convirtiéndose en el séptimo crimen contra un miembro de la
Federal en lo que va de 2010; y solicitar que se tomen en forma
urgente las medidas pertinentes.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
Cuando era
adolescente, la gran ilusión de Diego D´Andreis era ser policía.
Ayer, dos asaltantes quisieron robarle su automóvil y lo mataron
delante de su madre y de su hermana porque llevaba puesto su
uniforme de la Policía Federal.
"Lo mataron como a
un perro", dijo Amalia, la madre de la víctima. D´Andreis, quien se
desempeñaba en la comisaría 35a., se convirtió en el quinto
efectivo de la Policía Federal asesinado en lo que va del año.
Según informaron
fuentes policiales y los familiares de la víctima, el violento episodio
ocurrió ayer, minutos después de las 0.30, en la vivienda situada
en Los Caldenes 1052, en la localidad de Manuel Alberti, en Pilar.
"Después de
dispararle a mi hijo y mientras estaba agonizando en el piso, los
delincuentes le pegaron patadas en las costillas. Además, se
pelearon entre ellos para ver quién se quedaba con el arma de
Diego", dijo entre lágrimas la madre de la víctima.
El agente, que estaba
vestido con parte de su uniforme reglamentario y una campera
particular, entró con el auto al garaje y, cuando se aprestaba a
cerrar el portón de ingreso, fue sorprendido por dos jóvenes
armados que le exigieron que entregara el automóvil.
"Diego no tenía
miedo. Siempre llegaba pasada la medianoche porque trabajaba
en Núñez y volvía tranquilo. Lo mataron porque era policía. Yo le
decía que no entrara en la policía, pero él quería eso. Tengo otro
hijo, mayor, que es policía en la División Robos y Hurtos, que le
decía lo mismo, pero el sueño de Diego era ser policía y le gustaba
su trabajo", explicó la madre.
Karina, la hermana de
la víctima, expresó: "Soy enfermera, me dedico a salvar vidas con
los médicos, y esta vez no pude hacer nada por mi hermano, que
no pudo defenderse".
Doce horas después
del homicidio, policías de la comisaría de Tortuguitas detuvieron a
dos sospechosos. Uno de ellos sería un joven, de 23 años, que
habría sido identificado por su alias: "Trillín". Mientras que el otro
imputado tiene 17 años y fue apresado en un importante country
del partido de Pilar, donde trabajaba como jardinero.
"Le apuntaron con el
arma a mi mamá y le dijeron que se metiera dentro de la casa, si
no, la mataban a ella también", relató Cristian D´Andreis, hermano
del policía asesinado, que afirmó que Diego "murió como un héroe,
combatiendo a la delincuencia".
Durante 2009, fueron
seis en total los miembros fallecidos en dicha institución y los cinco
que van durante 2010 preocupan a las autoridades, según
confiaron a lanacion.com fuentes de la fuerza.
Según registros de la
misma Policía Federal, desde 1938 no pasa un año entero sin
una víctima en cumplimiento del deber.
Los casos. El
12 de enero, el sargento Jerónimo Muñoz intentó impedir un robo
abordo de un colectivo de la línea 176, en el partido de Tres de
Febrero y luego de forcejear con los delincuentes recibió un tiro en
la cabeza. Fue el primer Policía Federal asesinado en 2010.
Un mes y medio más
tarde, el agente Maximiliano Fernández, de 21 años fue
asesinado al ser sorprendido por al menos tres delincuentes, que
lo atacaron cuando caminaba junto a su novia en la localidad
bonaerense de Laferrère, en el partido de La Matanza. El
uniformado se resistió a un robo.
En la primera semana
de marzo, el suboficial Sergio Rodríguez, de 38 años, falleció al
recibir un impacto de bala en la cabeza en medio de una pelea
entre grupos antagónicos de la barra brava de Estudiantes de La
Plata.
El 8 de julio, el agente
Jorge Alberto Daglio perdió la vida en Lomas de Zamora. El policía
se encontraba cerca de un locutorio que estaba siendo asaltado y
al intentar impedir el atraco recibió un disparo de uno de los
delincuentes.
Los cinco asesinatos
de
La inseguridad que
asuela al país sigue sin dar tregua. Ayer, 8 de agosto, un agente
de la Policía Federal fue asesinado en la villa 31 de Retiro y se
convirtió en el tercer agente de la fuerza en ser abatido en apenas
cinco días, y es el séptimo en lo que va del año.
La víctima fue
identificada como Gustavo Saucedo, de 32 años, que prestaba
servicios en la comisaría 46a de esta ciudad, cuya jurisdicción
abarca el barrio de Retiro y comprende a la villa 31.
Con la muerte de
Saucedo ya son siete los policías federales abatidos en
enfrentamientos con delincuentes en lo que va del 2010, uno más
que los registrados en todo 2009.
La muerte del agente
se produjo cuando quiso identificar a un sospechoso armado cerca
de la terminal de ómnibus. El hecho tuvo lugar en el interior de la
villa, frente a la casa 40 de la calle 5, cerca de la intersección con
la calle 8, y a corta distancia de uno de los accesos vehiculares de
la terminal de ómnibus.
De acuerdo con
trascendidos policiales, el episodio comenzó pasadas las 4 de ayer,
cuando la víctima y otros dos agentes que prestan servicio en la
misma seccional se hallaban de franco y vestidos de civil, en un bar
de las inmediaciones de la comisaría. Tras percatarse de la
presencia de un hombre posiblemente armado en el comercio, que
luego se retiraría de allí, Saucedo lo siguió a la calle para darle la
voz de alto. El sospechoso extrajo, entonces, su arma y abrió fuego
contra el agente policial.
Los trascendidos
indican que Saucedo fue capaz de responder al fuego con su arma
reglamentaria antes de recibir un disparo en la cabeza que lo dejó
gravemente herido.
Al oír los disparos, los
policías que habían acompañado a Saucedo corrieron a la calle y
empezaron a perseguir al sospechoso, al tiempo que ponían a la
comisaría sobre aviso de lo ocurrido.
Ambos agentes fueron
reforzados luego por varios efectivos despachados por la seccional,
que iniciaron un rastrillaje en los pasillos del asentamiento en
busca del sospechoso y de un posible acompañante.
En el transcurso de
este rastrillaje, los policías encontraron a un sospechoso oculto en
una casilla y le impartieron la voz de alto, a lo que esta persona
respondió abriendo fuego y dando inicio a un nuevo
enfrentamiento, que culminaría cuando el delincuente logró huir
hacia el interior de la villa.
El agente Saucedo fue
posteriormente evacuado en helicóptero hacia el hospital
Fernández, donde los médicos que lo atendieron constataron que
había perdido la vida a causa de la herida recibida en la cabeza.
Pesquisas posteriores
efectuadas en el lugar de los hechos determinaron que mientras
Saucedo había estado tendido en la calle donde había ocurrido el
tiroteo, fue rodeado por un grupo de habitantes de la villa que le
habrían arrebatado su arma reglamentaria.
Según informaron
fuentes policiales a LA NACION, la causa de la muerte del agente
Saucedo quedó en manos de la Fiscalía Nacional en lo Criminal de
Instrucción N° 9, a cargo del fiscal Martín Niklison.
LA NACION intentó en
repetidas oportunidades comunicarse tanto con la seccional en la
que Saucedo prestaba servicios como con la fiscalía encargada de
la investigación, sin resultados.
En Pilar y en
Vicente López
La muerte de Saucedo
fue el tercer homicidio de un agente de la Policía Federal en menos
de una semana. El pasado miércoles, el agente Diego D´Andreis,
de 23 años, asignado a la comisaría 35a, fue sorprendido por dos
delincuentes mientras regresaba a su domicilio, en la localidad
bonaerense de Pilar. Tras identificar a D´Andreis como policía, los
asaltantes abrieron fuego contra él; lo hirieron en el pecho y le
provocaron la muerte, mientras la madre y dos sobrinas del agente
presenciaban la escena.
Por el homicidio de
D´Andreis, se encuentran detenidos dos hombres, uno de 25 años
y otro de 23, mientras que un menor de 17 que había sido
detenido ya fue liberado.
Anteayer fue el turno
del oficial ayudante Cristian Aoun, de 29 años, que se
desempeñaba como custodio en el Ministerio de Economía de la
Nación y fue ultimado en la localidad de Florida, perteneciente al
partido bonaerense de Vicente López, mientras llevaba su
automóvil a un taller mecánico. Al llegar, Aoun se encontró con dos
delincuentes que asaltaban el taller, quienes, al identificarlo como
policía, le dispararon y lo mataron de un tiro en el cuello. Los
delincuentes permanecen todavía prófugos.
Fuente: La Nacion. 9-
8-2010
Por todo lo expuesto,
le solicito a mis pares que me acompañen en la aprobación del
presente proyecto
Firmante | Distrito | Bloque |
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BIANCHI, IVANA MARIA | SAN LUIS | PERONISMO FEDERAL |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
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