La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar beneplácito por el cumplimiento de los 30 años de firmado el Tratado de Paz y Amistad entre la República Argentina y la República de Chile.

Señor presidente:

El Tratado de Paz y Amistad entre Argentina y Chile, o el "Tratado del Beagle", fue firmado por ambos estados en la ciudad del Vaticano el 29 de noviembre de 1984. Participaron de la misma los ministros de Relaciones Exteriores de Argentina (Dante Caputo) y de Chile (Jaime del Valle). No acudió el Presidente Raúl Alfonsín porque en ese entonces los hermanos chilenos se encontraban bajo una sangrienta y lamentable dictadura, y por ende no contaban con un presidente legítimo.

Estableciendo la fijación del límite entre los dos desde el canal Beagle hasta el pasaje de Drake al sur del cabo de Hornos, este tratado finalizó el llamado "Conflicto del Beagle", por el cual ambas naciones hermanas - bajo sendas dictaduras- estuvieron a punto de llegar a la guerra. Además de la delimitación terrestre y marítima, estableció un procedimiento para la resolución de disputas y determinó los derechos de navegación para buques de cualquier de los dos países en aguas del otro. Esto incluyó al Estrecho de Magallanes, establecido desde 1881 como una zona desmilitarizada.

En definitiva, las islas en la parte norte del Canal de Beagle son hoy argentinas y las sureñas chilenas. Este acuerdo se logró con la intervención del entonces Papa Juan Pablo II, quien mediara a tiempo de evitar la guerra, cuando tropas argentinas ya se disponían a tomarlas por la fuerza.

A los 25 años de firmado ese Tratado, las presidentas Cristina Fernández de Kirchner y Michelle Bachelet firmaron el Tratado de Maipú de Integración y Cooperación entre ambos estados. Como dijera la Presidenta Fernández de Kirchner en ocasión de su firma,

"este cruce que queremos hacer nosotras, Michelle, y que hemos declarado de interés nacional, quiere sellar el derecho a la igualdad en nuestras sociedades y a la amistad entre nuestros pueblos." (1)

Dos Tratados entonces que priorizan la Paz y la Amistad entre nuestras naciones, demostrando como ha avanzado la historia desde aquellos fatídicos últimos años de los 70 cuando todo indicaba que el futuro bilateral sería sombrío. Hoy tenemos también la alegría extra de poder decir que en el Vaticano, el tercer estado involucrado, hay un ciudadano argentino ocupando el puesto más alto de la jerarquía católica, religión que profesan mayoritariamente tanto Chile como Argentina. No habría podido ser en un mejor momento.

Queremos entonces agradecer una vez más al Vaticano por su pacífica intervención, felicitar a ambas presidentas latinoamericanas por poder celebrar, juntas otra vez, los cinco años de firmado el Tratado de Maipú, pero por encima de todo congratular al Pueblo Argentino y al Pueblo Chileno, porque estos últimos 30 años han sido de paz, amistad y concordancia. Y expresar el deseo de que dentro de 30 años más, nos encontremos aquí diciendo las exactas mismas palabras: Paz y Amistad.

Por todo lo expuesto, solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del siguiente proyecto.