La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar repudio a los actos de violencia y opresión contra el Gobierno de Ecuador, al riesgo de quebrantar la democracia del país sudamericano.

Señor presidente:

Mediante el presente proyecto resolución queremos expresar repudio a los actos de violencia que ocurrieron en la República de Ecuador.

Cientos de efectivos policiales utilizaron la violencia como medio para expresar su descontento con el gobierno de turno. Tomaron, entre otras cosas, el cuartel principal de Quito y el aeropuerto de la capital del país. Según fuentes periodísticas, los hombres protestan por la aplicación de una nueva ley de servicios públicos que aducen les quitará beneficios salariales y laborales. Además, se han producido saqueos, piquetes y todo tipo de actos de violencia en las calles.

Un elemento que aumenta el nivel de tensión ya existente en el país ecuatoriano es la agresión al Presidente Correa. Al salir de uno de los edificios tomados, fue agredido con gases lacrimógenos y objetos como botellas.

El presidente Correa declaró que "los sectores amotinados de las Fuerzas de Seguridad apuntaron al presidente, y atribuyó la crisis a una "conspiración permanente de la oposición". "Esta oposición busca un golpe de Estado porque no puede ganar en las urnas".

Estos signos de violencia perjudican a todo el país. No debemos olvidar que en junio de 2009 un comportamiento como el de este tipo, terminó en la destitución del gobernante de Honduras, Manuel Zelaya. Es por esto que debemos tomar las medidas necesarias para que el proceso democrático no sea quebrantado.

Las instituciones son los elementos que sostienen nuestro sistema democrático y en consecuencia el respeto a las mismas es uno de los valores principales a resguardar.

La aparición de actores externos y no externos al gobierno, dispuestos a utilizar la violencia para cumplir sus objetivos hacen peligrar a toda la nación. Nuevamente son unos pocos que arrastran al todo a una situación negativa, a un posible quiebre de la democracia. Y esto trae aparejado grandes consecuencias negativas.

Existen otros medios para expresar las opiniones y deseos de la sociedad, pero no lo son la violencia, ni el intento de tomar un gobierno. Los medios institucionales son quienes nos brindan las herramientas necesarias para ejercer libremente nuestras opiniones. La revuelta popular no es la solución.

Es necesario que el país ecuatoriano vuelva al orden, y desde ese escenario solucionar los conflictos puntuales que existen. Nosotros, como país democrático, no podemos mostrarnos ausentes a este tipo de hechos.

Consideramos de suma relevancia expresar repudio a los actos de violencia que vive el país ecuatoriano. Por lo expuesto, solicito la aprobación del presente Proyecto de Resolución.