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PROYECTO DE TP


Expediente 7033-D-2006
Sumario: SECUESTROS VIRTUALES. PROHIBICION DE UTILIZACION DE TELEFONOS CELULARES A INTERNOS ALOJADOS EN ESTABLECIMIENTOS DEPENDIENTES DEL SERVICIO PENITENCIARIO FEDERAL.
Fecha: 22/11/2006
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 179
Proyecto
El Senado y Cámara de Diputados...


SECUESTROS VIRTUALES
Artículo 1º): Prohíbase a las personas alojadas en los establecimientos de detención dependientes del Servicio Penitenciario Federal, el uso de teléfonos celulares.-
Artículo 2º): Comuníquese al Poder Ejecutivo.-

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


El secuestro virtual consiste en llamar a un número telefónico al azar y manifestarle al interlocutor que tiene secuestrado a un miembro cercano de su familia, que por el momento no puede decirle quien es, pero que si hace todo lo que le indican, el familiar pronto será liberado.
Luego le dicen que cuenta con 10 minutos para ir a comprar tarjetas telefónicas, por un valor que oscila entre los 200 y los 500 pesos, y que se apure, ya que volverán a comunicarse para dar mas indicaciones.
Efectivamente vuelven a llamarlo, le indican que raspe las tarjetas y les pasen el código, la clave y la empresa de cada una, para posteriormente decir que dejará en libertad a su familiar.
Se detectó también que esta maniobra es realizada por presos desde el teléfono instalado en el interior de las cárceles, por lo cual algunas llamadas ingresan por sistema de cobro revertido, aunque no siempre sucede de este modo. Aquí resulta importante destacar que la mayoría de la información sobre el parentesco y el nombre del supuesto damnificado, siempre es aportada por comentarios que realiza el que esta siendo extorsionado.
Otro modo de engaño consiste en lo siguiente:
1. Se recibe una llamada telefónica donde se hace saber que tienen una persona en un hospital que sufrió un accidente, y que tenía ese número de teléfono.
2. Luego le solicitan el nombre de algún familiar y cuando otorgan todos los datos, algunas veces hasta como estaba vestido, pasan a decirle que, en realidad lo tienen secuestrado.
3. El engaño radica en que no se ha secuestrado a ningún familiar, lo que se busca en realidad es desesperar a quien recibe la llamada, al no estar con sus familiares cercanos.
La segunda variante es cometida por varias personas. Esta modalidad se lleva a cabo del siguiente modo:
1- En este caso, se cuenta con alguna información de la persona que recibe la llamada.
2- Se comunican con el damnificado a varios teléfonos.
3- Lo llaman por su propio nombre.
4- Le indican quien es el familiar secuestrado.
5- Se solicitan claves de las tarjetas telefónicas, como en el caso anterior, o la entrega de dinero, siempre en cantidades que puedan ser conseguidas en poco tiempo.
6- Luego le indican donde dejarlo o en que lugar esperar para que alguien pase a retirarlo.
En estos casos tampoco se ha secuestrado a persona alguna.
La cantidad de llamadas de este tipo, se incrementan los viernes por la noche y, muy especialmente, los sábados, ya que son días en los cuales muchos hijos concurren a sitios donde es difícil ubicarlos.
Ante un hecho de esta naturaleza se recomienda:
1- No perder la calma y procurar no aportar información que podría ser utilizada por los delincuentes.
2- Si quien recibe el llamado no resulta shokeado por la noticia, dar el nombre de una persona y parentesco inexistentes, para confirmar de este modo la mentira.
3- También se aconseja comenzar a rastrear telefónicamente a sus familiares mas directos, y hacerse ayudar por otro familiar para dividirse las personas a llamar, y así poder ubicar a las posibles víctimas en el menor tiempo posible.
4- Avisar siempre a la Policía.
5- Se recomienda además no tirar las tarjetas telefónicas, ya que de esa manera se puede rastrear al autor y o cómplices del delito.
Nunca y bajo ningún concepto debe aceptar un código ni claves telefónicas, que no provengan de una tarjeta en perfecto estado, ya que los códigos informados de cualquier otro modo seguramente proviene de un delito de los mencionados, con lo cual no solo permite completar el delito sino que se convierte en participe necesario con las consecuencias penales que ello implica.
El secuestro virtual es una modalidad delictiva de la que fueron víctima desde el músico Charly García, hasta un juez y un policía acostumbrados a investigar secuestros extorsivos, un piloto presidencial y el despachante de aduanas Facundo Azulay que terminó asesinado.
El caso de Charly García ocurrió en agosto de 2004, cuando al músico le dijeron que su hijo estaba secuestrado, ya que a los pocos minutos, el joven llegó a la casa.
El 11 de mayo de 2004 fue el turno del juez Jorge Luis Ballestero. La empleada doméstica del magistrado y su esposa atendieron una llamada en la que le advertían que una de sus hijas estaba secuestrada, cuando en realidad estaba rindiendo un examen en la facultad.
El 10 de febrero de 2005 Facundo Azulay, un despachante de aduanas, recibió un llamado en sus oficinas en el que le dijeron que tenían un familiar secuestrado, aunque todo era una farsa.
Azulay salió a pagar el rescate, pero los delincuentes decidieron transformar lo que era un secuestro virtual en uno real, lo capturaron, cobraron un rescate, pero lo asesinaron de un balazo en la cabeza en una villa del Partido de La Matanza.
Por todo lo expuesto solicito de mis pares el acompañamiento del presente proyecto de Ley.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
SOLANAS, RAUL PATRICIO ENTRE RIOS FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
LEGISLACION PENAL (Primera Competencia)
Trámite
Cámara Movimiento Fecha Resultado
Diputados REPRODUCIDO POR EXPEDIENTE 2322-D-08