La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar el más profundo repudio ante la posible intervención militar extranjera en la República de Siria y manifestar preocupación ante la situación de su pueblo hoy.

Señor presidente:

Como plantea nuestra cancillería, la posible utilización de armas químicas sobre civiles en Siria añade un eslabón más de gravedad a la ya aguda crisis que se vive en aquel país. Argentina ha tenido un profundo compromiso con la no proliferación de armas químicas (firmando y ratificando la "Convención de armas químicas" de 1995 y, junto a Brasil y Chile, la "Declaración de Mendoza" de 1991) y de armas de destrucción masiva ("Protocolo de Ginebra" de 1969 y el "Tratado de No Proliferación Nuclear" en 1995). Su compromiso con la paz mundial y la no proliferación de este tipo de armas es tanto reconocida como irreprochable. Así también, sabemos que la Argentina es un país comprometido con el Derecho Internacional, y es de suponer que si se han utilizado armas químicas - tanto por el Estado sirio como por los grupos insurgentes- las mismas constituyen no solo crímenes de guerra, sino también crímenes de lesa humanidad. La posición de nuestro país es que los responsables sean llevados ante la Corte Penal Internacional para responder por sus acciones. Por ello, la Argentina apoya el trabajo de investigación que está siendo llevado adelante por el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon.

Pero así también, toda Latinoamérica en general y Argentina (desde la fundación de la "Doctrina Drago" en 1902) en particular rechazan la intervención militar extranjera. En lare situación que se encuentra el país sirio, una intervención armada para proteger a los civiles podría agudizar el conflicto y profundizar la crisis. No se puede tomar el art. 39 de la Carta de Naciones Unidas en donde se habla de "quebrantamiento de la paz" para proponer una intervención armada que solo haría añicos toda posibilidad de negociación de una tregua entre los bandos civiles. Se hace imprescindible preservar la soberanía, independencia e integridad territorial de Siria y el derecho a la autodeterminación de su pueblo, y a promover la solución del conflicto por vías diplomáticas sin más derramamiento de sangre. Es importante denunciar también que aquellos países que tienen asiento permanente en el Consejo de Seguridad y que pretenden mostrarse indignados ante los horrores que padece el pueblo sirio, son en realidad los proveedores de armamentos de ambos bandos en contienda. Nuestro país cree que un esfuerzo sincero por terminar con el conflicto debería incluir un embargo de armas a Siria.

La Argentina se encuentra abierta a la posibilidad de realizar una intervención humanitaria (no militar) en el país en conflicto. De no ser posible a través del Consejo de Seguridad, se deberá recurrir a la Asamblea General. Como ha planteado el Canciller Timerman "Nuestro país propone otorgar el mandato necesario al Secretario General para definir la autoría de la masacre derivada

del uso de armas químicas, y desde el conocimiento de lo sucedido debatir una eventual intervención humanitaria y diplomática avalada por la Asamblea General". Otra opción sería que los 15 cancilleres que representan a los países miembros del Consejo de Seguridad se convoquen ya mismo en Siria para exigir el cese de la violencia y el inicio de un diálogo entre las partes en conflicto, como ha propuesto también nuestro país.

En resumen, es importante destacar que la Argentina respalda las investigaciones llevadas adelante por el Secretario General y sostiene que de haber responsables, estos deberán rendir cuentas ante la Corte Penal Internacional. Así mismo, la Argentina repudia la doble moral de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad que se rasgan las vestiduras por las masacres en Siria, al mismo tiempo que le venden armas y propone un embargo de armamentos para forzar un alto al fuego. Y por último, nuestro país rechaza totalmente una intervención militar extranjera en suelo sirio, contraproponiendo una intervención humanitaria para aplacar los padecimientos del pueblo de Siria y encontrar una solución pacífica al conflicto.

Por todo lo expuesto solicito el acompañamiento de este proyecto a todos mis compañeros.