Proyectos »

PROYECTO DE TP


Expediente 6218-D-2011
Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO SOBRE LA CANTIDAD DE PESCADO U OTRO RECURSO NATURAL ALIMENTICIO BOTADO POR LOS PESQUEROS CON BANDERA NACIONAL U OTROS QUE REALICEN ACTIVIDADES DE PESCA EN AGUAS ARGENTINAS.
Fecha: 02/02/2012
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 196
Proyecto
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:


Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional que proceda a informar a esta Honorable Cámara sobre:
1. La cantidad estimada en toneladas de pescado u otro recurso natural alimenticio que es botada por los pesqueros con bandera nacional u otros que realicen actividades de pesca en aguas territoriales argentinas.
2. Las medidas conducentes que ha adoptado o prevé adoptar para remediar el derroche de dichos recursos.
3. El motivo por el cual no se practica la inspección a bordo, por parte de la autoridad jurisdiccional pertinente, de la actividad de los buques que realizan la actividad pesquera en las aguas del Mar Argentino.

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


Por estos días la prensa argentina e internacional se ocupa extensamente de lo que está acaeciendo en Punta Tombo, Chubut, donde miles y miles de pingüinos llegan hasta esas playas cercanas a la Península de Valdez. Los llamados pájaros bobos son la atracción para visitantes argentinos y extranjeros. Desde hace varias temporadas esta especie y otra aves patagónicas están siendo desplazadas por los albatros y las gaviotas que se han reproducido de tal forma y en tal cantidad, que algunos biólogos del CENPAT (Centro de Estudios del Medio Ambiente Patagónico), alarmados, estudian esta anomalía. A lo largo de todo el gigantesco golfo San Jorge y en localidades pesqueras aledañas de Chubut y Santa Cruz, los habitantes del lugar ven el cielo oscurecerse cuando las bandadas terminan literalmente tapando al sol. Esta desmesura en la reproducción de estas aves se debe a que cada día encuentran más comida en el mar. Por ello son cien veces más que en los cercanos años noventa. Resulta que tanto, que los albatros como las gaviotas encuentran flotando cientos de toneladas de peces muertos muy cerca de la costa.
El origen de esta ilimitada fuente de alimentos se inicia cuando los inspectores que iban a bordo de los pesqueros y los barcos fresqueros que buscan langostinos, fueron reasignados como "observadores", con un casi nulo poder de policía.
Este hecho coincidió casualmente con dos situaciones que aportaron a la pesca indiscriminada:
1. La Comunidad Económica Europea expulsó de sus mares a los buques congeladores que eran altamente depredadores. Ante la imposibilidad de trabajar en el viejo continente las grandes empresas españolas emigraron hacia Argentina, cuyo mar es uno de los extensos del globo.
2. Las autoridades provinciales de Santa Cruz y Chubut completaron el círculo permitiendo a las naves factorías foráneas tirar por la borda aquel pescado que no les conviniera.
Desde entonces, los buques que buscan langostinos sólo se interesan por esta especie que vale en el mercado internacional 18 dólares el kilogramo. Por ello, arrojan -desechándolos -al mar la merluza, el cazón, el abadejo, las rayas y hasta el salmón, que caen atrapados en sus redes. Como la merluza es un predador del langostino, ejemplares de gran kilaje quedan atrapados, son llevados a la cubierta y luego lanzados al mar. Ya que estos peces viven a 80 o 90 metros bajo la superficie, una vez subidos al barco mueren por una anormal diferencia de presión. Las especies no son capaces de soportar esa disparidad. Aunque sean devueltos al océano, ya están sin vida.
La Argentina tenía un cupo de pesca cercano a las 300 mil toneladas anuales. La flota nacional nunca superaba este límite con sus capturas y por lo expuesto anteriormente, al año de ingresados al caladero argentino los buques congeladores europeos, pescaron 1,2 millones de toneladas, cuatro veces más de lo aconsejado. A partir de ahí, el colapso. Todo esto sumado a que se bota anualmente 500 toneladas de pescado, aproximadamente.
Más allá de los recursos que se pierden y el desastre ambiental resultante de esta situación; lo más grave es que se tira alimento que podría ser aprovechado por miles o millones de argentinos. Y también exportado, con el consiguiente ingreso de divisas, siempre necesarias, nunca desechables. Cabe destacar los valores nutricios de este alimento que aporta cantidades significativas de fósforo a la dieta, siendo ideal para el desarrollo y nutrición de niños, hoy, dicho sea de paso, inmersos en una creciente obesidad y otros males secuentes, producto precisamente de la llamada "comida basura" o "rápida" que prescinde de las virtudes del pescados, entre otros alimentos..
Estos números que causan vergüenza fueron denunciados una y otra vez por numerosos marineros. Los mismos han implorado a los empresarios, a los gobernadores patagónicos y a las autoridades nacionales que terminen con esta depredación del recurso.
Para cerrar, cito un extracto de un informe de la investigadora belga Prof. Alicia Fardel, que investiga el incremento de la población de gaviotas y albatros:
"La causa de semejante mutación en la población de aves no es otra que la enorme riqueza de los argentinos, casi tan grande como su propia estupidez."
Por todo lo expuesto solicito a mis pares su voto afirmativo para la sanción del presente proyecto de declaración, con el consiguiente pedido de informes al Poder Ejecutivo Nacional.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
ASSEFF, ALBERTO BUENOS AIRES FRENTE PERONISTA
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
INTERESES MARITIMOS, FLUVIALES, PESQUEROS Y PORTUARIOS (Primera Competencia)