La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional, a través del organismo competente, realice una campaña de Información Masiva que tenga por objeto DAR A CONOCER LOS DERECHOS QUE TIENEN LAS PERSONAS ANTE LOS CASOS DE IRREGULARIDADES DURANTE EL PROCESO DE ABLACIÓN y TRANSPLANTE DE ORGANOS.

Señor presidente:

La donación de órganos permite salvar seres humanos y mejorar su calidad de vida; es un "Principio Humanitario Universal". Es un acto que requiere generosidad, solidaridad, valentía y entereza, tanto si se trata de los órganos propios, como los de un familiar fallecido.

Actualmente más de 5.000 pacientes se encuentran esperando la posibilidad de recibir un órgano que les permita seguir viviendo.

La única Autoridad Nacional Responsable en materia de ablación y trasplante en nuestro país es el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (I.N.C.U.C.A.I.), que actúa en todo el territorio nacional con un criterio federal y descentralizado en materia de distribución y procuración de órganos. El I.N.C.U.C.A.I. atiende los derechos, garantías y obligaciones de todas las personas e instituciones que participan del proceso de procuración y trasplante de órganos. En este proceso están comprometidos los donantes (potenciales y efectivos), sus familiares, los receptores, los equipos médicos y las instituciones autorizadas para el trasplante de órganos.

La Ley 24.193 (actualizada por las leyes 25.281 y 26.066) establece los requisitos y previsiones que deben ser tenidos en cuenta durante el proceso de ablación y transplante, así como las situaciones que ameritan una sanción, y las sanciones correspondientes en cada caso.

Durante todo el proceso, son imprescindibles la responsabilidad y el respeto, hacia el cuerpo del donador y hacia los familiares que autorizan la donación de los órganos de sus seres queridos que han fallecido.

Se conocen casos en los cuales los familiares "comunican informalmente" situaciones de inducción o coacción vividas durante el proceso de donación de órganos de un familiar directo, pero desconocen el derecho que les asiste de denunciar dichas irregularidades. El único medio para que se lleven a acabo las investigaciones pertinentes y se sancione a los responsables de las infracciones a la ley, es la denuncia ante la autoridad sanitaria jurisdiccional correspondiente.

En tanto los posibles dadores de órganos nos sintamos seguros de que nuestra integridad está protegida, menos reservas tendremos a la hora de decidir si donar o no.

Por todo lo expuesto, solicito a mis pares el acompañamiento de la presente