La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Su más enérgico y profundo repudio a las declaraciones realizadas en un reportaje radial el día 18 de septiembre por el Señor Juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Dr. Eugenio Raúl ZAFFARONI, en las que comparó al gobierno actual con el régimen de facto que usurpó el poder entre los años 1976 y 1983, además de ofender a los soldados argentinos que batallaron en la Guerra de Malvinas.

Señor presidente:

En la actualidad nuestro país vive el período más largo ininterrumpido de vigencia de la norma democrática. Mucho costó conseguir ella, y la transición del último gobierno de fáctico al constitucional supuso un tiempo en que la ciudadanía redobló sus esfuerzos en pos de rescatar los valores que la vida en democracia trae con sí.

Desde allí, con un paso que en algunos momentos pudo haber sido irregular, entre todos construimos una nación libre y soberana, en la que el respeto a la dignidad humana, la libertad y los derechos de todos y cada uno de sus integrantes es la regla. Y en aquellos momentos en que ella pudo haber tambaleado, fue la propia sociedad la que reaccionó y profundizó aquellos pilares democráticos que definen la vida comunitaria.

En definitiva, la democracia, como forma de gobierno y como estilo de conducirse, se encuentra plenamente asentada en la Argentina, y representa una base esencial e innegociable que define el contrato que efectuamos como sociedad. Aun así, ciertos comportamientos antidemocráticos y autoritarios persisten en alguno de sus miembros. No obstante ser ellos siempre repudiables, en cuanto importa la lesión de derechos fundamentales y la negación del otro, más merecen el repudio de este cuerpo en cuanto proviene de alguien que actuó durante doce años como Ministro de la máxima autoridad judicial nacional, y que actualmente ostenta el cargo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, como es el Dr. Eugenio Raúl ZAFFARONI.

La contradicción del discurso de ZAFFARONI con el alto cargo que tuvo el Honor de ejercer en nuestro Poder Judicial y el que actualmente ejerce en la instancia jurisdiccional del Sistema Interamericano de Derechos Humanos resulta patente, y, como tal, merecedora del máximo de los repudios por parte de esta Cámara. Declaraciones tales como “hubo un colapso económico como resultado de programa de endeudamiento veloz del Gobierno. En un momento se acabaron los dólares y ahora vemos cómo se repite la historia. Se hacen cosas para distraer la atención. Esto ya lo hemos vivido en el 82’, cuando el procedimiento económico fue el mismo y la dictadura hizo Malvinas, que tantos muertos nos costó. Menos mal que ahora (por el Señor Presidente Mauricio Macri) no le declara la guerra a Paraguay”, a más de peligrosas e imprudentes, resultan sumamente dañinas para la cultura democrática que impera en este país y al paradigma del Estado Constitucional y Convencional de Derecho. Además, esa comparación ofende particularmente los sentimientos de todos los héroes que batallaron en la Guerra de Malvinas, quienes sirvieron a la patria mientras el jurista lo hacía como juez de la más cruel dictadura que nuestro país recuerde.

Muy a pesar de los deseos de ZAFFARONI, esta Administración se encuentra en pleno vigor, y su fortaleza reside en su propia gestión, como así también en la plena convicción de los argentinos relativa al sostenimiento de la democracia como forma de gobierno y como estilo de vida.

Por lo expresado, queda así fundamentado el presente proyecto y a consideración de los diputados y las diputadas para su sanción.