La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Rendir homenaje a la memoria de los 16 presos políticos fusilados en la Base Almirante Zar, en la provincia de Chubut, en la madrugada del 22 de agosto de 1972 al cumplirse 40 años de la llamada "Masacre de Trelew".

Señor presidente:

Con motivo del 40 aniversario del fusilamiento de los 16 presos políticos asesinados en la Base Almirante Zar durante la madrugada del 22 de agosto de 1972, creemos pertinente que esta Honorable Cámara rinda homenaje a las víctimas del terrorismo de Estado.

Alejandro Ulla, Alfredo Kohon, Ana María Villarreal de Santucho (quien estaba embarazada), Carlos Alberto del Rey, Carlos Astudillo, Clarisa Lea Place, Eduardo Capello, Humberto Suárez, Humberto Toschi, José Ricardo Mena, María Angélica Sabelli, Mariano Pujadas, Mario Emilio Delfino, Miguel Ángel Polti, Pedro Bonet, Susana Lesgart e hirieron a Alberto Miguel Camps ( Desaparecido luego en 1977), María Antonia Berger (Desaparecida en 1979) y Ricardo René Haidar (Desaparecido en 1982) fueron los 19 jóvenes militantes populares que se habían fugado del penal de Rawson y al ser rodeados por las Fuerzas se entregaron a la Justicia Federal luego de una conferencia de prensa brindada en el aeropuerto de la ciudad de Trelew para pedir por su seguridad.

Sin embargo, fueron llevados a la base naval Almirante Zar de Trelew y en la noche del 22 de agosto de 1972 fueron sacados de sus celdas y fusilados. Tres de ellos lograron sobrevivir, dieron sus testimonios sobre lo sucedido, luego fueron secuestrados y desaparecidos por la dictadura militar iniciada en 1976.

Quien habían logrado tomar el avión y fugarse a Chile, eran reclamados por el gobierno de facto del general Alejandro Agustín Lanusse que intentaba presionar por todos los medios al presidente de Chile Salvador Allende para que deportara a los fugados en calidad de prisioneros. Mientras mantenía toda la zona de Rawson y Trelew ocupada por fuerzas militares del ejército y gendarmería, quienes patrullaban continuamente y hacían prácticamente imposible cualquier nuevo intento de fuga. La propia Base Aeronaval de Trelew mantenía una numerosa dotación de tres mil efectivos de la Armada. Regía en toda la zona un estado de máxima alerta, en un clima de absoluto hermetismo y gran tensión, la noche del 21 de agosto permanecían reunidos en la Casa de Gobierno los miembros de la Junta de Comandantes en Jefe de las tres fuerzas armadas, colaboradores y ministros.

Esa misma noche, a las 03:30 horas del 22 de agosto, en la Base Naval Almirante Zar, los 19 detenidos fueron sorpresivamente despertados y sacados de sus celdas. Según testimonios de los tres únicos reclusos sobrevivientes, mientras estaban formados y obligados a mirar hacia el piso fueron ametrallados indefensos por una patrulla a cargo del capitán de corbeta Luis Emilio Sosa y del teniente Roberto Bravo, falleciendo la mayoría en el acto, y algunos heridos fueron rematados con armas cortas en el piso. Luego, al terminar los disparos, los siete sobrevivientes son llevados a la enfermería, pero no se les presta ningún tipo de asistencia médica. Los únicos tres sobrevivientes fueron trasladados al día siguiente a Puerto Belgrano, donde fueron intervenidos.

La versión oficial del suceso indicaba que se había producido un nuevo intento de fuga, con 16 muertos y tres heridos entre los prisioneros. Un enfrentamiento en el que todas las bajas eran de presos, ni un solo herido entre los guardias. La misma noche del 22 el gobierno sancionó la ley 19.797 que prohibía toda difusión de informaciones sobre organizaciones guerrilleras.

Por eso, señor presidente, es deber de esta honorable Cámara, en el contexto del histórico juicio por delitos de lesa humanidad que se lleva adelante para condenar a los responsables de estos crímenes, rendir homenaje a los jóvenes fusilados hace 40 años y hacer memoria de su lucha.