La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar beneplácito al conmemorarse el 25° aniversario de la reunificación de Alemania.

Señor presidente:

Motiva la presente declaración el beneplácito por el cumplimiento de los 25 años de la reunificación de Alemania, basada en el artículo 23 de la Constitución alemana.

Alemania es un país que reúne dentro de su seno a muchas naciones. Todas las tribus germánicas hicieron de sus pueblos culturas ricas que tomaron la decisión de caminar juntas a fines del Siglo XIX, mezclándose en un proceso que se conoció como: Unificación Alemana.

Sin embargo, la atrocidad del nazismo durante la Segunda Guerra Mundial, dio por tierra con esos sueños de hermandad. Tras ella, las potencias vencedoras se repartieron el territorio alemán como si fuera el tablero de un juego de estrategia. Padres, hijos, hermanos, primos y amigos, fueron separados los unos de los otros tras la completa división del país entre capitalismo y comunismo.

La identidad de un pueblo es capaz de superar cualquier ideología política, social o económica. Constituye lazos mucho más fuertes que ni siquiera el tiempo es capaz de cortar. Para 1989, los alemanes a uno y otro lado del Muro sabían que había llegado el momento de volver a vivir bajo un mismo techo, el de una república democrática donde la libertad, la justicia y la solidaridad imperaran.

La caída del Muro de Berlín significó el fin de una era que llenó de angustias al mundo entero, el cual estaba sumido en una Guerra Fría entre dos bloques antagónicos. El diálogo entre las naciones se retomó ya que la humanidad comprendió que era hora de levantar las barreras que seguían dividiendo la vida de los alemanes, y de todos aquellos que estaban detrás de aquella gélida Cortina de Hierro.

Gracias a la reformas de apertura introducidas por el Secretario General de la Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov, se firmó el 12 de septiembre de 1990 en Moscú, el "Tratado sobre el acuerdo final con respecto a Alemania"; también, conocido como "Tratado de Dos más Cuatro". Dicho tratado permitió la adhesión de los Cinco Estados Federados Orientales a la Ley Fundamental de Alemania, que se concretó el 3 de octubre de 1990. El Preámbulo de la Constitución alemana de 1949, llevaba expreso este anhelo de búsqueda de la reunificación: la constitución era para todo el pueblo alemán, buscando mediante libre autodeterminación lograr la unión y la libertad de Alemania, para contribuir dentro de una Europa unida a la paz mundial. La unidad no le fue impuesta; sino que fue la conclusión de un proceso al que se llegó de forma pacifica

La reunificación de Alemania dejó de ser una asignatura pendiente y motivo de conflicto. Forma parte de un proceso histórico que tuvo como objeto la libertad de los pueblos y la creación de un nuevo orden de paz continental

La importancia histórica del 3 de Octubre de 1990 fue destacada por el presidente Richard von Weizsaecker, durante el acto de celebración en la filarmónica de Berlín: "Hoy podemos construir juntos un nuevo comienzo. La unificación de Alemania no es sólo la ampliación de la República Federal de Alemania: Es el día en el que por primera vez en la historia, la Alemania entera encuentra su lugar permanente en el ámbito de las democracias de occidente...

Estoy convencido que lograremos superar viejos y nuevos surcos.

Podremos amalgamar el patriotismo constitucional de unos, con la solidaridad y fraternidad de otros, para lograr un todo consistente". ( Boletin oficial del 05. Oktober 1990 del gobienro federal, feunte:

Karin Lau/Karlheinz Lau: Einheit in Frieden und Freiheit. Braunschweig 1991)

Como argentinos sentimos orgullo de nuestros hermanos inmigrantes alemanes, que supieron poblar este vasto territorio dejando impresa una huella imborrable en nuestra cultura por medio de una gastronomía rica en sabores, teatro, letras, arquitectura, una música amplia en bemoles; cooperación y aportes en ciencia y tecnología, intercambio comercial fecundo y el concepto único de solidaridad fraternal entre paisanos. La elaboración de su pasado no se ha cerrado; cada generación seguramente buscará entender su historia, en especial una tan compleja como la alemana. Pero sin lugar a dudas, ha habido muchos éxitos en estos 25 años de unión, por lo que tenemos el agrado de recordar este hecho histórico para el pueblo alemán, celebrando que ha sabido sobreponerse a las diferencias internas, mirando siempre hacia el futuro con un mismo anhelo: el de una Alemania unida y comprometida con la paz mundial.

Por todo lo expuesto y considerando que el próximo 3 de octubre se celebrarán los 25 años desde la reunificación de Alemania, solicito a mis pares me acompañen en la aprobación de la presente iniciativa.