La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar pesar por el fallecimiento de Esio Ariel Silveira, destacado político y líder demócrata cristiano, ocurrido el 23 de septiembre de 2015.

Señor presidente:

En Corrientes, en estos días, estamos despidiendo a un líder. Un político democristiano que nos mostró la garra que debe tener alguien que en serio quiere cambiar el mundo. Y nos convenció de que es posible cambiarlo.

Esio Ariel Silveira, el Pocho, nació el 03/11/1940 en Monte Caseros donde cursó su primaria, el secundario lo hizo en el Ruíz de Montoya en Posadas, para luego recibirse de abogado en la UNNE.

Muy joven, en 1958, abraza el ideal Demócrata Cristiano y cumple un rol de enorme valor, transformándose en un auténtico líder. En la Universidad, como estudiante, promovió un gran movimiento que fue fundamental para que el año 1964 en elecciones de todos los claustros se instale en la UNNE el primer Rector "Social Cristiano", el Ingeniero Jorge Atlántico Rodríguez. Pocho Silveira fue Secretario de Acción Social con una más que fructífera acción que le valió gran aceptación en el estudiantado, aún en sus enconados adversarios que adherían al marxismo. Fue Secretario del Bloque DC en la Cámara de Diputados, en el período comprendido entre octubre de 1963 y junio de 1966, con un aporte enorme al trabajo legislativo.

Durante la dictadura trabajó en INCUPO donde dejó también grandes antecedentes de laboriosidad e inteligencia. En 1989 asume como Diputado Provincial y su labor muy buena, siendo el Diputado que más proyectos presentó, algunos de alto impacto como la creación de la Fiscalía de funciones Administrativas, y el apoyo del Estado Provincial, que luego fue nulo, a la siembra de "caña de azúcar", para biocombustibles, proyecto suyo para el PDC del que fue su promotor central (felizmente en marcha gracias al apoyo del gobierno nacional a partir del año 2005) en base a la siembra por parte del agricultor minifundista, con la idea que el minifundio a través de este cultivo y su industrialización, se convierta en "unidad económica".

Siempre lo recordarán todos los correntinos relacionados a la producción, los campesinos, los trabajadores, por su ciclópea actividad de difusión y esclarecimiento de lo que se llamó y aún se recuerda como "Plan Caña de Azúcar", que sus detractores siguen confundiendo con un monocultivo pero que en realidad es aún hoy la mejor traducción de la visión cristiana de la Reforma Agraria, esa que sigue reclamando la Comisión Episcopal de Justicia y Paz. Porque socializaba el acceso a los medios de producción al poner en manos de los propios pequeños productores rurales y agricultores familiares la industrialización del cultivo.

Es recordado, también, por el énfasis puesto en combatir la naturalización de la pobreza, repitiendo siempre que hay ejemplo de países que lo lograron pero sobre todo, explicitando que Dios no quiere la pobreza, que es una obra del hombre.

Al Partido Demócrata Cristiano le dio gran parte de su vida. Fue Presidente de la Junta Nacional 10 años, asumiendo en 1989 como sucesor de Carlos Auyero. Su actuación allí lo convirtió en un líder irreemplazable, al nivel de Horacio Sueldo. Recorrió el país y su actuación fue brillante en el plano internacional, destacándose en los Congresos de la IDC por su coherencia ideológica lo que le valió críticas de la derecha partidaria, tanto de Chile como de Alemania, especialmente de esta última, pues Pocho la fustigó implacablemente por su notorio desvío doctrinario-ideológico (hoy, a plena luz, con Merkel más cerca de Hitler que de Konrad Adenauer).

Fue uno de los primeros en señalar y denunciar en los foros latinoamericanos de la ODCA las desviaciones de la IDC (anteriormente Internacional Demócrata Cristiana y actual I. D. de Centro) que dejaba entrar a los partidos de la más rancia y oligárquica derecha europea y la derechización de los propios organismos de Política Internacional como El Maritain (Coalición Cívica - ARI en la Argentina) y la Konrad Adenauer, empeñada en defender el institucionalismo neoliberal en América Latina.

Le tocó presidir un Partido Nacional de gran incidencia por aquellas épocas en la política argentina durante dos períodos. Pero fundamentalmente ante la renuncia de Carlos Auyero, que dejara herida de muerte a la DC, tuvo la capacidad de conducir y apostar el caudal político restante del Partido Demócrata Cristiano a la necesaria expulsión por vía democrática del Menemismo, pero no por causa de la corrupción (que también repudiamos) sino por el necesario cambio del modelo económico. Después el corralito, el corralón y demás le terminaron de dar la razón.

Esio Ariel Silveira fue, además, quien tuvo la claridad de apostar a este nuevo proceso de emancipación latinoamericana que iniciaban Néstor, Lula y Chavez.

Sin dudas Esio fue el timonel de tormenta y el ultimo líder verdaderamente socialcristiano del Partido Demócrata Cristiano después de la renuncia de Auyero, tironeado por las corrientes puritanas y nacionalistas católicas de este partido nacional y popular.

Sumado a todo lo dicho, resta decir que fue enemigo público número uno del conservadorismo correntino, orador insuperable desde aquellos famosos Ateneos del comedor estudiantil de la UNNE que recuerdan los mayores, por lo que no podemos dejar de darle nuestro saludo de despedida a tan gran político argentino.

Por todo lo expuesto, solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto.