La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su más profundo pesar por el fallecimiento de la Cantante Mercedes Sosa, como asi también rendir los homenajes a su persona por su rol de artista reconocida internacionalmente y por ser un referente de las instituciones democráticas de nuestro país.

Señor presidente:

Es un tiempo de profundo pesar para la sociedad Argentina toda ya que estamos presenciando la partida de una gran artista, cantautora y referente de la democracia de nuestro país.

Mercedes Sosa falleció la madrugada del 04 de octubre de 2009 en la ciudad de Buenos Aires, a los 74 años, luego de varios días luchando por su vida tras padecer una disfunción renal progresiva. Ese día será recordado como el día en que la argentina y el mundo despidieron a la máxima representante del folclore argentino y la mejor voz que haya dado la historia de nuestro país.

Había nacido un nueve de julio de 1935 en un hogar humilde de Tucumán, el cual la introdujo en los comienzos de su amor por las danzas folclóricas. A los 15 años, como también cantaba, participó de un concurso folclórico que organizaba su provincia. Ganó el concurso vocal y así empezó su carrera artística inimaginable para el momento. Luego de Cosquín 1965, en el que el público quedó a sus pies, comenzó a ser reconocida popularmente y se transformó en una artista de renombre. Su música empezó a trascender las fronteras y Latinoamérica comenzó a disfrutar de su voz incomparable. Corría el año 1967 y el gobierno militar había prohibido la difusión de su música por la Radio Nacional.

En la década del setenta tras editar varios discos con personalidades latinoamericanas en la que expresaban su fuerte compromiso social, comenzó a sufrir la persecución de la dictadura, mas tarde la prisión y luego el exilio, produciéndose su retorno al país recién en el año 1982.

Comienza en ese momento una serie de conciertos que se convirtieron en un acto cultural contra la dictadura, así también como el renacer de la música popular argentina, al incluir temas y músicos provenientes de diferentes espacios y corrientes musicales.

Por la difusión de la música latinoamericana popular, por el exilio y su posterior regreso en el 82, por su reconocimiento internacional, se convirtió en la embajadora de nuestro país en cualquier parte del planeta. En vida fue distinguida por las Naciones Unidas y la UNESCO. Fue premiada en el exterior y en varias provincias de nuestro país y hasta fue homenajeada en el Congreso Nacional por su trayectoria ejemplar.

Es por todo ello que la desaparición de una personalidad tal ha provocado que se firme un decreto por el cual se han declarado tres días de duelo nacional a quien se definió como un "inconfundible símbolo de la música argentina". Sus restos han sido velados en el Congreso de la Nación ya que son estos honores los mínimos merecidos por una personalidad de esta envergadura.

Así como tan bien los Diputados Nacionales le debemos nuestros más sinceros respetos, las más sentidas condolencias a su familia y una despedida acorde a la relevancia de su trayectoria y a su aporte al sostenimiento de los principios democráticos.

Era considerada por todos como la voz de nuestro país. Embajadora de nuestra cultura y nuestras costumbres. "La Negra", como todo el mundo la llamaba, era no solo respetada por sus pares sino también seguida y amada por el publico en general sin distinción de edad o gustos musicales. Mujer de gran sencillez y profesionalismo que la llevó hasta sus últimos trabajos a grabar con los artistas mas reconocidos de la Argentina y el mundo como Joaquín Sabina, Caetano Veloso y Joan Manuel Serrat entre otros.

Por todo lo expuesto es que solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto