La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar beneplácito por el centésimo aniversario de la sanción de la Ley N.° 9143 (Ley Palacios), primera iniciativa legislativa de toda América contra la explotación sexual de mujeres, niñas y niños, que se celebrará el día 23 de septiembre de 2013.

Señor presidente:

La llamada Ley Palacios (Ley N.° 9143) fue sancionada el 23 de septiembre de 1913, aunque Alfredo Palacios había presentado el proyecto de ley por primera vez el 29 de mayo de 1907. Se trata de la primera ley en América que penaliza a los responsables de la explotación sexual, así como protege a las víctimas. Significa el primer intento legislativo en la lucha contra la explotación sexual de mujeres, niñas y niños.

Consciente de la situación nacional e internacional en relación con el tráfico de mujeres con fines prostibularios, Alfredo Palacios vio la necesidad de incluir este delito en el Código Penal. En la fundamentación del proyecto, expresa:

El extraordinario desarrollo del proxenetismo en Buenos Aires ha determinado nobles y generosas iniciativas de personas honorables... pero desgraciadamente no han podido poner serios valladares a la lacra social que se extendía y se extiende como la gota de aceite... Los inmundos mercaderes de esta lacra son legión... En este fenómeno social del proxenetismo, el caften juega un papel importantísimo. Este ser despreciable, muy conocido en esta Capital, es física y moralmente repugnante... (GARCIA COSTA, Víctor: Alfredo Palacios: entre el clavel y la espada, Planeta, Buenos Aires, 1996).

Esta ley reforma el Código Penal introduciendo la figura del proxeneta. De esta manera, castiga a quien "promueva o facilite la prostitución o corrupción de menores de edad para satisfacer deseos ajenos, aunque medie el consentimiento de la víctima" (texto original de la ley, disponible en Diario de Sesiones de la Cámara de Senadores, Volumen 2, página 1107, digitalizado en http://books.google.com.ar). Las penas iban de 3 a 6 años de prisión en caso de que la mujer fuera mayor de 18 años, de 6 a 10 años si la víctima era mayor de 12 y menor de 18, y hasta 15 años de prisión si era menor de 12 años. En el caso de que "mediara violencia, amenaza o abuso de autoridad, o cualquier otro medio de intimidación, como también si el autor fuese ascendiente, marido, hermano o hermana, tutor o persona encargada de su educación o guarda" (ibídem), debía aplicarse la pena máxima, además de la pérdida de patria potestad, tutela o guarda, de corresponder.

Tal es la trascendencia de la sanción de la Ley Palacios que, en el marco de la Conferencia Mundial contra la Explotación Sexual, Regional y Global, realizada en Dhaka -Bangladesh- del 25 al 30 de enero de 1999, se resolvió rendir un homenaje a Alfredo Palacios declarando a nivel mundial el día 23 de septiembre como Día contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas.

Cien años después de la sanción de la ley 9143, que trascendió los límites del país e influyó en la legislación de toda América, la trata de personas sigue siendo uno de los negocios ilegales más rentables a nivel mundial -y quizá por ello más difíciles de eliminar-, y su erradicación aún es una deuda social que requiere de un firme compromiso por parte de toda la sociedad, así como de todos los niveles del Estado.

La importancia de la Ley Palacios radica justamente en que inició la lucha contra la prostitución de mujeres, niñas y niños, en una época en que esta terrible práctica era moneda corriente. Por este motivo, entendemos necesario destacar el centenario de la Ley 9143, así como enaltecer la figura de su autor, como una forma de reconocer el trabajo de distintas organizaciones en esta materia y de homenajear a las víctimas.

Por todo lo expuesto, conscientes de que aún queda mucho por hacer en materia de trata de personas y haciendo hincapié en la importancia de la sanción de la Ley Palacios como el primer intento para iniciar esta lucha, solicito a mis pares su acompañamiento en el presente proyecto de resolución.