La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Que vería con agrado que el Poder Ejecutivo a través de los órganos competentes, disponga las medidas necesarias tendientes a agilizar la implementación de diversas acciones para prevenir y evitar la propagación de la enfermedad de citrus, conocida como ex.Greening, dado que de ingresar al País, afectaría gravemente la actividad citrícola argentina.-

Señor presidente:

El HLB, enfermedad originaria de China, conocida como ex Greening, que ataca a todas las variedades de cítricos, penetró en Brasil en 2004 y se propagó por varios países del continente americano como USA, Cuba, Puerto Rico y República Dominicana. La Argentina está libre de esta enfermedad, pero hospeda al insecto que la transmite en las provincias de Misiones, Corrientes, Chaco, Formosa, Salta y Jujuy, según relevamientos realizados por distintas unidades del INTA. De allí la preocupación por la amenaza a la actividad citrícola argentina. Si bien el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), junto al Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria y la Secretaría de Agricultura- ha planificado diversas acciones para prevenir su propagación dentro del país, todavía su implementación sufre demoras. Debe tenerse en cuenta que el psílido asiático Diaphorina citri, transmisor del Huanglongbing (HLB), también conocido como ex Greening, es una enfermedad de los cítricos que ocasiona pérdidas catastróficas, destruye totalmente a la planta infectada y, por el momento, no tiene cura. Si ingresara al país ésta plaga, en desmedro de las expectativas productivas para 2009 -que prevén rendimientos por encima de 2,5 millones de toneladas en limones, naranjas, mandarinas y pomelos, además de exportaciones por 506 mil toneladas- la enfermedad podría desencadenar consecuencias muy negativas para el sector ya que afecta a todas las especies de cítricos, según informaron sectores involucrados en ésta actividad,

Por ello, las autoridades de Salta, Jujuy, Misiones y Entre Ríos y la Asociación Fitosanitaria del NOA, solicitaron que se apresuren las acciones para evitar la entrada de la plaga en los centros productivos. La solicitud tiene su justificación, dado que basta recordar que en la década del '60 se reportaron daños del 100% en Sudáfrica; en 1996, 7 millones de árboles fueron destruidos en Filipinas y 3 millones en Indonesia; y en los y en los '80, las naranjas dulces desaparecieron de Arabia Saudita. Además de los daños

| indirectos como la pérdida de mercados y aumentos en los costos de producción.

Según la Federación Argentina de Citrus, la Argentina es el 7° exportador mundial de cítricos, con casi 2.700 toneladas enviadas al exterior, una superficie plantada de 139.516 hectáreas y un promedio anual de consumo de 22,733 kilos por habitante, además de ser una actividad en crecimiento, genera una fuente de trabajo valiosa en las economías regionales.

Por las importantes razones señaladas, solicito a mis pares me acompañen en la aprobación de éste proyecto.-