La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Rendir homenaje a María Eva Duarte de Perón, con motivo de cumplirse el 26 de julio de 2008 el 56º aniversario de su muerte.

Señor presidente:

Una vez más, el pueblo argentino recuerda el paso a la historia de la mujer que en nuestra Patria más ha hecho por los trabajadores, las mujeres, los ancianos y los niños. Eva Perón dijo: "Quiero vivir eternamente en el corazón de nuestro Pueblo". En el día de hoy, queremos dar testimonio de que su deseo es una realidad en el corazón de todos nosotros.

La voz oficial anunció por la radio que a las 20.25 hs. del 26 de julio de 1952, Eva Perón pasó a la inmortalidad. El historiador Félix Luna describe a los días que siguieron "como si una gran tiniebla descendiera en todos lados". Se decretó duelo nacional por un mes. Fue velada durante 12 días bajo la Cúpula de la Secretaría de Trabajo.

La Fundación que llevaba su nombre llegó a todo el país para suplir las carencias temporarias de un proceso de redistribución del ingreso y nacionalización de la economía. Se llevaron a cabo acciones que ya no serían de caridad y de paternalismo sino de justicia social: "Cuando los ricos piensan en los pobres, piensan en pobre"; "Donde hay una necesidad hay un derecho".

En ese contexto, a cincuenta y seis años de su muerte, que el recuerdo de Evita adquiere proyección universal. Su llama pasionaria se transmite en los pueblos como un legado, de generación en generación.

Evita nunca desempeño un cargo oficial, - el general Perón decía: "no son los cargos los que dignifican a los hombres, sino los hombres los que honran los cargos" - , y sin embargo marcó un antes y un después en la vida de los argentinos. Lo logró por su entrega militante a la causa del Movimiento Nacional Justicialista, "el peronismo no se aprende ni se proclama, se comprende y se siente, por eso es convicción y es fe"; "renunciar a la política es renunciar a la lucha, renunciar a la lucha es renunciar a la vida, y la vida es lucha".

Sin duda, para ella el mejor homenaje es y será, el compromiso que en esta fecha es propicio renovar, el compromiso con su único heredero, el Pueblo Argentino.