Proyectos »

PROYECTO DE TP


Expediente 3823-D-2006
Sumario: ACADEMIA NACIONAL DE CIENCIAS SOCIALES DE MENDOZA: INCORPORACION AL REGIMEN DE LAS ACADEMIAS NACIONALES, DECRETO LEY 4362/55.
Fecha: 07/07/2006
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 87
Proyecto
El Senado y Cámara de Diputados...


ACADEMIA NACIONAL DE CIENCIAS SOCIALES DE MENDOZA
ARTICULO 1°.- Incorpórase al régimen establecido por el Decreto Ley Nº 4362 del 30 de noviembre de 1955 a la Academia de Ciencias Sociales de Mendoza.
ARTICULO 2°.- A partir de la entrada en vigencia de la presente ley, se denominará a la Academia reconocida por el artículo precedente, con el nombre de Academia Nacional de Ciencias Sociales de Mendoza
ARTICULO 3°.- Comuníquese al Poder Ejecutivo.-

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


El presente proyecto de ley a través del cual se incorpora en el régimen establecido por el Decreto Ley nº 4363 a la Academia de Ciencias Sociales de Mendoza, tiene por objeto otorgar un justo reconocimiento institucional a la relevante trayectoria en la investigación y producción científica llevada a cabo desde su creación, como asimismo en el fomento y difusión del conocimiento de las ciencias sociales.
Desde sus comienzos las academias han desarrollado una destacada labor, constituyendo en las diferentes épocas el ámbito de manifestación del progreso y acrecentamiento de las ciencias, las letras y las artes.
Si bien el término academia deriva de Akademos, habitante mitológico del Atica, dueño de un hermoso jardín, en el que enseñó Platón, la patria de las academias - como reunión de sabios y artistas - fue Egipto. Fue Tolomeo I quien fundó, en Alejandría, el museo que tenía anexa la famosa biblioteca, en donde deliberaron los talentos más insignes de la época.
En los albores de la era cristiana, los romanos fundaron varias Academias en sus dominios, especialmente en ciudades como Francia y España, en donde la primera academia fue fundada por Abderramán III, califa de Córdoba, quien vivió entre los años 891 y 961; en Granada se desarrolló otra Academia, la que adquirió trascendencia al atesorar y difundir las obras de Aristóteles por Europa toda.
En el Renacimiento proliferaron y descollaron estas instituciones en Europa. Italia no tenía ciudad sin su Academia, y destacadas figuras, como Torricelli y Galileo, participaron en ellas. No obstante, con excepción de la Academia de Ciencias de Nápoles de 1560 y de la Academia de la Crusca, las demás tuvieron una efímera existencia.
El desarrollo del conocimiento humano influyó para que aparecieran academias especializadas, como las de matemáticas, de historia, de ciencias naturales, de medicina y otras, por un lado, y por otro, cierta demanda de la cultura propició la creación de aquellas que se dedicaron a la purificación de las lenguas. Así nacieron las academias de la lengua alemana, de la lengua francesa y de la española, en cada una de sus naciones, entre los años 1517 y 1714.
Paralelamente se desarrollaban en estos mismos lugares las academias de ciencias.
Por su parte las academias más antiguas referidas a temas de ciencias sociales, fueron la Academia Portuguesa de Historia en 1.720 y la Real Academia de historia de España en 1738.
Sin embargo el desarrollo de las ciencias sociales fue lento, dado su origen en la filosofía, que ya era considerada la gran madre del saber. Sus motores eran la reflexión, la intuición y la deducción.
La lógica debía estudiar principalmente la teoría de la inducción, como el único método de la ciencia, negando la posibilidad de las disciplinas sociales como ciencias, porque consideró que lo social estaba anclado en la subjetividad.
Esta nueva estructura del pensamiento trascendió las ciencias naturales y la física, invadiendo el campo de otras disciplinas, que aspiraban a convertirse en ciencias, a partir de aquel modelo. Se fue perdiendo el liderazgo de la filosofía, y es en esta época que Augusto Comte realiza una clasificación de las ciencias y bautiza a la sociología con ese nombre, llamándola también Física Social.
Las nuevas disciplinas comenzaron a ser sensibles a exigencias de una actividad intelectual de otro tipo, a utilizar metodologías de investigación distintas a las de la filosofía, es decir metodologías empíricas, inductivas, requeridas por las nuevas condiciones sociales emergentes de la revolución industrial. El campo de las ciencias sociales comenzó a poblarse de investigadores, los que, con sus aportes, elaboraron teorías y modelos para la interpretación de las sociedades. En los principios del pasado siglo, las discusiones epistemológicas no empañan la necesidad que tienen las ciencias sociales de reflexionar sobre los nuevos paradigmas que permitan operar sobre los nuevos contextos sociales.
Es en este nuevo y complejo contexto de las academias y de las ciencias sociales en donde nace la Academia de Ciencias Sociales de Mendoza, creada por la incansable labor e inspiración de Juan Ramón Guevara, quien acompañado por distinguidos profesionales, cultores de distintas disciplinas en el área de las ciencias sociales, se convirtieron en los miembros fundadores de tan prestigiosa institución.
Así fue como en el mes de marzo de 1.978, se reunieron en la ciudad de Mendoza el Dr. Juan Ramón Guevara y veintiocho profesionales, cultores de distintas disciplinas en el área de las ciencias sociales, con el objeto de deliberar acerca de la fundación de la Academia de Ciencias Sociales de Mendoza, cumpliendo así un viejo anhelo del Centro de Investigaciones Sociológica de la Provincia. Estos miembros fundadores fueron los que en la Asamblea General en el mes de octubre del 1981 inauguran formalmente la Academia, con la aprobación de sus Estatutos y la designación de las autoridades. La ceremonia de inauguración fue el 17 de setiembre de 1982.
La Academia de Ciencias Sociales se constituyó como Asociación Civil sin Fines de lucro y obtuvo su autorización como Persona Jurídica por Decreto n° 3299/82 del Gobierno de la Provincia de Mendoza el 13 de setiembre de 1982.
En su larga trayectoria la Academia ha desarrollado una destacada labor orientada al estímulo de la investigación y producción científica, a través de la realización de congresos, conferencias, foros y jornadas, ejemplo de ello resultó el Primer Foro Permanente de Educación realizado en el mes de octubre de 2005, que fuera auspiciado por numerosas instituciones educativas y por el Gobierno de la Provincia de Mendoza.
Por todo lo expuesto, Señor Presidente, es que solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto de ley.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
LEMOS, SILVIA BEATRIZ MENDOZA UCR
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
EDUCACION (Primera Competencia)