La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

El profundo beneplácito por el desinteresado y humanitario accionar del Dr. MIGUEL SEPULVEDA, médico rural que se desempeña en el Departamento de San José de Valle Fértil en la provincia de San Juan, haciendo visitas domiciliarias a sus pacientes a lomo de mula.

Señor presidente:

El Día Nacional del Médico Rural se conmemora por el nacimiento en 1895, en Esperanza, Santa Fé, del médico Esteban Laureano Maradona. Se graduó en la Universidad de Buenos Aires en 1926 con diploma de honor. Tuvo una profunda vocación, trabajó siempre por la calidad de vida de los indígenas y los más necesitados, quienes lo rodearon de afecto y reconocimiento. Se lo identificaba popularmente como el Médico de los Pobres y murió en la ciudad de Rosario, Santa Fé, el 14 de enero de 1995, a los 99 años. El día fue instituido mediante la Ley 25.448.

Pero mejor es transcribir lo que es un médico rural actual en lo expresado por el cronista Leonardo Gatica del "Diario de Cuyo" de la provincia de San Juan quien refiere sobre el Dr. Miguel Sepúlveda y su accionar:

"No es el único caso, ni el referente máximo de la medicina rural, pero sí se ven reflejadas en él las características de los médicos de zonas alejadas. Es Miguel Sepúlveda, médico de Valle Fértil que dejó la ciudad (200 kms.) para dedicarse a la medicina rural sin importarle la posibilidad de ganar más plata. Es muy querido por los habitantes de distintos puntos del departamento. Y cada dos semanas viaja más de 16 horas a lomo de mula, para atender a pacientes de puestos sanitarios en las sierras de Riveros, Chávez y Elizondo.

Su historia cobra mayo relevancia hoy, que se conmemora el Día Nacional del Médico Rural.

De esta manera, pese a no disponer de recursos de alta complejidad y no tener las mejores comodidades, Miguel ama lo que hace, dejó posibilidades de trabajo en la ciudad y aseguró no cambiarlo por nada. Además sostuvo que "la gente del campo es muy cálida, no tiene maldad y brinda mucho amor". La atención que se ofrece en una zona alejada es más personalizada debido a que la gente que un médico rural atiende es la misma que comparte su vida. El trato médico-paciente es más humano. "No me considero un modelo a seguir, pero sí reconozco que hay que tener un criterio amplio, acá no sólo hay que dedicarse a la medicina sino que también hay que resolver problemas sociales", sostuvo Sepúlveda. En el departamento hay 9 médicos y 14 puestos sanitarios. Cada dos semanas, Miguel viaja, junto a un odontólogo, a lomo de mula hacia Sierra de Chávez. La distancia es de 56 kilómetros y tardan más de 8 horas de ida y lo mismo de vuelta. También viaja a Sierra de Elizondo y Sierra de Riveros, distantes unos 40 kilómetros. El operativo dura dos días y se instalan en puestos asistenciales, que funcionan en las escuelas serranas, y por el camino paran en las casas para hacer chequeos. "El paisaje es bellísimo, se puede apreciar las cascadas y los ríos. La gente es muy buena, por las noches dormimos en los centros sanitarios. Generalmente comemos un asado y en la reunión siempre hay un personaje del lugar que cuenta historias, generalmente de brujas", dijo Sepúlveda. Por su lado, Adriana Jaime, jefa de la Zona II de Salud Pública, que abarca Valle Fértil, Caucete, 25 de Mayo, Angaco y San Martín, y ex compañera de Miguel en el Valle, dijo que el médico "es muy buena persona y muy carismático, la gente del departamento lo quiere mucho. Está siempre de buen humor y no importa la hora ni el lugar en la que una persona necesite ser asistida, él está".

Además, contó que Miguel fue el primero en Valle Fértil en permitir que un padre entrara a la sala de partos para presenciar el nacimiento de su hijo. Miguel llegó a Valle Fértil junto a su familia en 1994. Está casado y tiene dos hijos. Desde su llegada, tiene muchísimos amigos. Además de su profesión tiene un pequeño taller de carpintería y producto de esto, su casa está amoblada con muebles hechos por él mismo. También hace algunas esculturas en yeso, tiza y madera."

Todo lo expuesto me exime de mayores comentarios sobre la noble actividad y la causa de hacer público el mismo mediante este reconocimiento, por lo que solicito de mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto.