La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Convocar al Ministro de Economía y Finanzas Públicas y al Secretario de Comercio, para que concurran a esta Honorable Cámara a fin de proporcionen las explicaciones e informes a que se refiere el Artículo 71 de la Constitución Nacional, sobre el eventual cierre de las importaciones de alimentos que dispondría el Poder Ejecutivo, en los términos del Art. 203 y 204 del Reglamento de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación.

Señor presidente:

El sector comercial exportador e importador se encuentra convulsionado ante el eventual cierre de las importaciones de alimentos que dispondría el Poder Ejecutivo, con las perjudiciales consecuencias que esta medida podría provocar, perjudicando a la economía del país, ya que podría dar lugar a medidas de reciprocidad.

Tengamos en cuenta que las posibles acciones a implementarse no se encuentran avaladas por este Congreso Nacional, según lo establece el Artículo 75 de la Constitución Nacional.

Recordemos que nuestro país vende alimentos al mundo por U$S 22.000 millones anuales y sólo importa en este tipo de productos por U$S 1.000 millones anuales, lo cual con medidas de reciprocidad ya anunciadas por los mercados internacionales que podrían ser afectados con esta medida, provocaría serio perjuicios a nuestra economía, más aún en momentos que la mundial se encuentra en crisis.

En particular la Unión Europea (UE) y específicamente España e Italia, y el Brasil reaccionaron fuertemente al cierre de las importaciones de alimentos, que hasta podría llegar a ser denunciado nuestro país, ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).

La Argentina prácticamente, exporta unas cuatro veces más de lo que importa en los rubros afectados por la medida anunciada. Hacia Brasil se destina un 20% de estos alimentos y en el primer trimestre de 2010, las ventas sumaron unos U$S 190 millones.

Al momento no existen ningún tipo de instrumento legal que avale las eventuales disposiciones limitativas, difusas y discrecionales, que al parecer solo se habrían impartidos directivas verbales por parte de la Secretaria de Comercio Interior al Instituto Nacional de Alimentos (INAL), organismo dependiente del Ministerio de Salud, para que no entregue nuevos certificados sanitarios para la importación de alimentos, sin previa autorización de la Secretaria señalada.

En el caso que existan necesidades para buscar un mejor equilibrio, existen otras medidas que previamente consensuadas, podrían llevar a una mejor solución en este tipo de transacciones comerciales, como ser: flexibilizar los grupos de alimentos, entre aquellos que no cuentan con una producción nacional que cubra la demanda interna y aquellos que complementan su producción nacional importando alguna línea de productos, caso de las multinacionales que trabajan con esquema de producción regional e intercambian sus productos entre sus filiales.

Asimismo causa extrañeza que la medida se conoce cuando se ha anunciado la reapertura, luego de seis años de paralización, de negociaciones para la liberación del comercio entre el MERCOSUR y la Unión Europea.

En particular Brasil es uno de los países que se ha sentido más afectado, al enterrase por los medios de comunicación y por comunicaciones verbales a los responsables de comercio exterior de supermercados y empresas exportadoras, de las medidas a adoptarse, a instrumentarse a partir de 1 de junio, creándose una incertidumbre total sobre la compra al exterior.

Al momento ya se han presentado graves inconveniente dado que existe mercadería que se encuentra en puertos, otras en viaje y con compromisos de importación convenidos para los próximos seis meses, así como hay productos que estarían siendo demorados en la Aduana a la espera de una autorización por parte de la Secretaría de Comercio Exterior. Existe la incertidumbre también, para el caso que empresas posean productos en stock sin tener precisiones de poder o no su venta a partir de la eventual vigencia de la disposición en cuestión.

Otro rubro que se ve afectado es el de la publicidad, dado que importadores invierten en él grandes sumas de dinero para las promoción de sus productos y marcas, con lo que ante esta situación restringirían sus inversiones en este aspecto.

No se encuentra una información oficial y clara de cual es la finalidad de la restricción, no se sabe si es para aumentar el déficit fiscal o para cuidar las divisas del país, con lo cual se crea más incertidumbre que abarca a más de un área de la economía nacional.

Es por todo lo señalado precedentemente, que se considera conveniente la presencia del Ministro de Economía y Finanzas Públicas y del Secretario de Comercio, para que aclaren fehacientemente la aplicación o no de las medidas restrictivas a fin de proporcionar a los mercados internos y externos las seguridades necesarias para el recíproco comercio, solicitando por lo cual la aprobación del presente proyecto.