El Senado y Cámara de Diputados...

ARTICULO 1º - Garantizar que en los restaurants o locales gastronómicos de todo el territorio de la República Argentina, se ofrezca al menos un menú apto para personas celíacas.

ARTICULO 2º - El organismo de aplicación y control será el Programa Nacional de Detección y Control de Enfermedad Celíaca, perteneciente al Ministerio de Salud de la Nación.

ARTICULO 3º - Comuníquese al Poder Ejecutivo Nacional.

Señor presidente:

La celiaquía es una enfermedad intestinal crónica que afecta la capacidad del intestino para absorber los nutrientes en forma adecuada.

Quienes la padecen deben realizar una dieta estricta sin trigo, avena, cebada y centeno para recuperar el funcionamiento intestinal y evitar las complicaciones derivadas del consumo de proteínas tóxicas.

En la Argentina se estima que 1 de cada 100 personas es celíaca y la enfermedad puede presentarse en cualquier momento de la vida, desde la lactancia hasta la adultez avanzada.

Según las cifras de la Asociación Celíaca Argentina, en el país hay más de 400 mil personas que padecen celiaquía, aunque se calcula que unos 25 mil enfermos desconocen su enfermedad.

La celiaquía es la intolerancia alimentaria al gluten que provoca una lesión grave en la mucosa del intestino delgado e impide una adecuada absorción de los nutrientes alimenticios.

Para detectar si una persona es celíaca, se deben realizar análisis de sangre que revelan si el sistema inmune está alterado por el consumo de gluten que recibe a través de los alimentos. Pero también es necesario realizar una biopsia endoscópica del duodeno, que determina si hay vellosidades dañadas del intestino, que son las que absorben los nutrientes. Al atrofiarse, no absorberán y provocaran un deterioro nutricional.

Por cada celíaco en nuestro país diagnosticado habría siete sin diagnóstico y existe una gran probabilidad de que la mayoría sean asintomáticos o que tengan síntomas pero no consultan, o consultan pero el médico al que consultan no piensa en ese diagnóstico.

La persona celiaca es autoinmune y su enfermedad suele producir daño en el intestino delgado. Generalmente se da más en mujeres, tres por cada hombre, y en personas de raza blanca que de piel oscura que tienen que ver con razones puramente genéticas. Puede presentarse en diversas formas: la clásica que presenta signos y síntomas de mala absorción, fundamentalmente diarrea y pérdida de peso. La atípicamediante manifestaciones como disfunción tiroidea (hipo e hipertiroidismo; hallazgos neurológicos como depresión y ataxia; trastornos ginecológicos, como menarca, que es la primera menstruación, abortos espontáneos; enfermedades cutáneas como la dermatitis herpetiforme; trastornos óseos como la osteoporosis y también deficiencias nutricionales como el déficit de hierro que produce anemia. Y la asintomática que en general se vincula con parientes de pacientes celíacos que entre el 10 y 15% tiene la probabilidad de ser celíacos. Esa probabilidad aumenta considerablemente en los familiares de primer orden de celíacos como es el caso de padres, hermanos e hijos.

Lo usual debería ser que el celíaco sea detectado en la infancia. Aunque en los últimos años, ha aumentado considerablemente el número de pacientes diagnosticados, debido a que es un tema que se conoce cada día más, y en general, del cual los médicos estamos más informados. La difusión masiva se debe en gran parte a la acción de los propios afectados, que agrupados en organizaciones independientes se preocupan por la difusión. De esta manera lograron productos que se asemejan al gluten y a veces son hasta mejores en nutrientes, así empresas grandes se están comprometiendo más y más. Pero de hecho, un 80% de los productos industrializados contienen gluten, entre ellos, medicamentos y productos de cosmética como es el champú y la pasta dental. También debo decir que los celíacos deben enfrentar precios exorbitantes, que en algunos casos llegan a un 300% más caros, por eso se habla de mercado cautivo.

Sin dudarlo el beneficio más importante llegó en el año 2009 con la sanción de la Ley 26.588 que declaró de interés nacional la atención médica y la investigación clínica y epidemiológica de la enfermedad celíaca, y que posteriormente se reglamentó a través del Decreto 528/11. La normativa establece desde una rotulación específica para los productos aptos para celíacos, la leyenda "Libre de gluten", acompañada del símbolo de un círculo con una barra cruzada sobre tres espigas, incluyendo la cobertura de estudios por parte de las obras sociales.

La medicina de un celíaco es, por decirlo de alguna manera, su comida y así es contemplado por la Ley Nacional y por eso determina que las prepagas y las obras sociales se deben hacer cargo de las harinas y premezclas libres de gluten.

Desde esta banca consideramos que la celiaquía es una condición, no una enfermedad. Que antes del diagnóstico el celíaco está enfermo, pero que luego, con la dieta correspondiente, la calidad de vida se recupera normalmente.

Hay pocas cosas más estimulantes que ir a comer afuera, pero es algo que no todas las personas pueden hacer, en especial aquellas que sufren la enfermedad celíaca.

Sucede que los celíacos padecen el acortamiento de ciertas vellosidades del intestino, lo que en definitiva provoca una intolerancia al gluten y se manifiesta con diarrea crónica, retraso del crecimiento y/o del desarrollo infantil, disnea, erupciones en la piel, pérdida de peso, cambios en el carácter, vómitos y vientre hinchado, aunque estos síntomas pueden estar ausentes y aparecen de vez en cuando.

En síntesis, que ir a comer a un restaurante para una persona con enfermedad celíaca representa una complicación. Sin embargo, deben existir restaurantes que ofrezcan en sus menús al menos un menú apto para personas celiacas, ofreciendo así una solución para este tipo de público.

Por todas las razones expuestas solicito a mis colegas diputados me acompañen con la aprobación del presente Proyecto de Ley.