La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su hondo pesar por el fallecimiento del artista plástico chaqueño Oscar Sánchez Kelly, el 31 de mayo de 2011.

Señor presidente:

El arte y los plásticos chaqueños están de duelo. El 31 de mayo murió, a los 68 años, Oscar Sánchez Kelly, que el 27 de ese mes había sufrido un accidente cerebro vascular (ACV) y se encontraba en un delicado estado de salud. El hecho ocurrió en las primeras horas de la tarde, antes de sus habituales clases en el Taller de Artes Visuales de la Universidad Nacional del Nordeste, donde ejercía la docencia desde hace décadas y se había ganado el respeto y la amistad de quienes lo trataron por su forma simple, amable y servicial de ser.

Tan controvertido como talentoso, Sánchez Kelly construyó una obra pictórica de gran valor y formó a generaciones de artistas desde el organismo de la Universidad que amaba entrañablemente como a sus colegas y empleados.

Oscar, cuyos padres eran ferroviarios, desde pequeño se destacó por su inquietud hacia el arte. Fue pintor, dibujante, grabador y docente nacido en Resistencia (Chaco, Argentina), el 2 de agosto de 1942. Realizó murales en la Universidad Nacional del Nordeste (Facultad de Humanidades), en la empresa algodonera Mides y en la empresa Telecom, y también exhibió su arte en otros puntos del país y el exterior como en España.

Quien mejor describió a Oscar fue su colega Marino Santa María, cuando señaló en el catálogo de su presentación en España: "Se caracteriza por una escritura pictórica de signos sencillos, que se inscriben en un tenso equilibrio entre la expresión desenfrenada y la precisión compositiva. Toques sensibles y caligráficos, signos y manchas gestuales se combinan en campos de colores potentes y delicadamente articulados".

A partir del antecedente del mural Tempo (Facultad de Humanidades, UNNE), se volcó decididamente al universo simbólico y lo puso de manifiesto en las series Realidad Interior, Itinerarios, Situaciones, Circunstancias, Signos, Tondos, Escrituras... Participó también como jurado en numerosos salones provinciales, regionales y nacionales; representó a su provincia, dictó conferencias, cursos y talleres de su especialidad referidos particularmente a los movimientos artísticos del siglo XX.

"Si nos situamos frente a la obra de Oscar Sánchez Kelly provistos de la información que nos ha legado la historia del arte, nuestro sentir y pensar navegan, indudablemente, en el orden de la abstracción; por supuesto que en ese recorrido nos remitimos no a la abstracción de estructuras geométricas, pero sí a la abstracción libre, expresionista, donde las posibilidades estéticas se encuentran en la esencia de la propia materia.

Los empastes y las zonas coloreadas se transforman en soporte en cuanto Sánchez Kelly los interviene con un signo que, desde el más profundo sentir, rasga o dibuja como un paisaje una huella de nuestra América, en nuestro espíritu, en nuestro pasado y nuestro futuro. Entonces la materia concentra la mística, un lugar donde contemplar y sumirse para desde ese lugar generar una obra nueva, cada obra es singular y única.

Sus realizaciones tienen la capacidad de modificar nuestra conciencia del arte, de mostrarnos el lugar donde soñar y de remitirnos al lugar donde meditar sobre la capacidad creadora y modificadora del ser, de incentivar en cada contemplador la creación, haciéndonos sentir que donde hay obra de Oscar Sánchez Kelly hay arte, hay vida.

Oscar no se fue, ya que estará siempre presente entre sus conocidos y compañeros a través de sus obras. Y es por su trascendencia cultural que solicitamos la aprobación de este proyecto de resolución.