La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

La Honorable Cámara de Diputados de la Nación manifiesta su más enérgico repudio al golpe de Estado que tuvo lugar el pasado domingo 28 del corriente en la República de Honduras, y aboga por la urgente restitución en su cargo y en sus funciones del depuesto Presidente Manuel Zelaya y, con ello, la consiguiente normalización política e institucional de esa Nación

Señor presidente:

El presente Proyecto de Declaración tiene por finalidad expresar la más enérgica condena al golpe cívico-militar que el domingo último interrumpió el orden constitucional en la hermana República de Honduras, a través de la detención y el envío forzado a la República de Costa Rica del Presidente Manuel Zelaya, cuyo mandato -conferido y legitimado por la voluntad popular- expira el 27 de enero de 2010.

El severo y unánime repudio al golpe militar en Honduras por parte de la comunidad internacional a través de líderes y mandatarios de todas las latitudes - incluido el de los Estados Unidos-, así como de los bloques regionales y organizaciones tales como la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE), es un claro indicador del sentimiento de rechazo que despertó la asonada, y de la fuerte presión mundial sobre sus responsables y ejecutores para que se proceda a la pronta recuperación del orden constitucional y democrático y de la paz social en ese país centroamericano, y la consabida liberación de los funcionarios, ministros y alcaldes detenidos y, en muchos casos, deportados.

La advertencia formulada al respecto en el sentido de que nos se reconocerá a ningún gobierno que surja de esta ruptura institucional, se condice plenamente con la exhortación generalizada a todas las partes involucradas en este lamentable suceso a que se respeten las normas democráticas, el Estado de Derecho y los principios de la Carta Democrática Interamericana que determina, entre otros puntos, que "...cualquier tensión y disputa existente debe ser resuelta pacíficamente a través del diálogo, libre de eventuales interferencias del extranjero".

En momentos en que se creían definitivamente superados en América Latina las asonadas militares, esta nueva interrupción de la institucionalidad y la vida constitucional en un país hermano enciende una luz de alerta y supone un claro precedente y un inquietante retroceso en la historia contemporánea de los países del continente, a la vez de perpetrar un acto de avasallamiento a la voluntad de sus pueblos, lo cual merece nuestro más severo repudio junto al pedido de una pronta normalización en la vigencia del Estado de Derecho.

Por las razones expuestas es que se solicita a los Sres. Legisladores su voto favorable para la aprobación del presente Proyecto de Declaración.