La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional, a través del Ministerio de Educación y Cultura de la Nación, que informe sobre los siguientes puntos atinentes al desenvolvimiento de la educación en el país, especialmente referida a la calidad de ese trascendental servicio:

1.- Resultados y extensión de la evaluación del perfeccionamiento de los docentes comparando la situación preexistente en 2003 y la de 2012;

2.- Porcentaje de escuelas públicas de todo el país, del ciclo primario, que brindan doble escolaridad;

3.- Desagregación del precedente dato por Regiones;

4.- Cantidad de hechos de violencia escolar, de cualquier naturaleza y envergadura, registrados durante el año 2012 en todo el país;

5.- Lineamiento de los planes y previsiones para neutralizar la ascendente violencia escolar;

6.- Si se ha contemplado evaluar escuela por escuela los resultados educativos, tomando diversos parámetros, y premiar a aquellos establecimientos relativamente mejores con estímulos pecuniarios y salariales;

7.- Si en la temática o contenido del perfeccionamiento docente se incluyen conceptos propios de la restauración del principio de autoridad, fortaleciendo psicológicamente a los maestros para que puedan ejercer su magisterio a partir de ese pilar paradigmático.

Señor presidente:

Es muy sencillo - y a la vez trascendental - fundar este Pedido de Informes. En efecto, es harto preocupante el descenso de la calidad de la educación argentina y es alarmante en grado sumo el nivel de violencia que se ha infiltrado en la escuela. Ambos males deben inquietarnos como representantes del pueblo. Está en la picota nada menos que el futuro inmediato del país y, obviamente, el porvenir a mediano y largo plazo.

La doble escolaridad es esencial para elevar la calidad educativa y también para contener a los niños alumnos, brindándoles más tiempo y por ende posibilitando un mayor aprendizaje, incluyendo la práctica de deportes e inclusive de juegos compartidos. Todo ello contribuye a una mejor e integral formación.

El perfeccionamiento docente es básico. Sólo maestros mejor preparados podrán transmitir educación de mayor calidad.

Se sabe de cierta -e inexplicable racionalmente- resistencia de algunos sectores gremiales al sistema de evaluación de los resultados educativos. Se aduce que esa evaluación podría conducir a discriminar unas escuelas de otras. En realidad, no existe tal discriminación, sino la introducción del sistema de premios y castigos, tan virtuoso en el mundo entero. Estimular para que los establecimientos educativos compitan sanamente para obtener mejores índices en orden a deserción escolar, promedio de calificaciones, armonía entre todo el conjunto educativo, desde los alumnos y docentes hasta el personal auxiliar y las familias de los educandos, entre otros parámetros, no es descalificar a nadie, sino incentivar la superación. Apostar a la mediocridad apareja un perjuicio para todos. Sortear a la mediocridad, buscar la superación, en contraste, trae beneficios para todos.

La violencia ha irrumpido en la escuela. Descarnada, crudamente. Viene de la des contención familiar o literalmente de la familia desconstruida por falta de paradigmas, por carencia de vivienda digna, por el colapso de la cultura del trabajo, por la drogadicción y el alcoholismo, por el proceso de deseducación y también de

desocialización. Un sinfín de problemáticas que llegan con rudeza a la escuela. Que ya no golpean sus puertas, sino que se introducen en ellas.

Se conoce de docentes literalmente atemorizados frente a tanta violencia proveniente de los alumnos y muchas veces de sus familias. Ante esta situación gravísima, algunos son atrapados por la resignación que lleva inexorablemente a la inacción y/o desidia frente al nocivo fenómeno. Está en crisis la idea misma de autoridad y sin ella falla - se derrumba - el sistema escolar.

En suma, son todas cuestiones que, por encima de banderías partidarias, nos inquietan sobremanera y por ello pedimos el respaldo del cuerpo para esta iniciativa.