PROYECTO DE TP


Expediente 2777-D-2013
Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO SOBRE DIVERSAS CUESTIONES RELACIONADAS CON LOS KILOS DE PILAS QUE SE RECOLECTAN ANUALMENTE.
Fecha: 07/05/2013
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 43
Proyecto
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:


Solicitar al Poder Ejecutivo y por su intermedio a quién corresponda, en virtud que en la Argentina no existen iniciativas gubernamentales tendientes a buscar soluciones a pesar de considerar a la pila un residuo peligroso según la ley nacional 24051. "La ley llama sustancias ecotóxicas a todo aquel desecho que si se libera, produce efectos adversos inmediatos o retardados en el medio ambiente.", se sirva informar sobre lo siguiente:
1)¿Cuántos kilos de pilas se recolectan anualmente? Indique por provincia desde el año 2003 a la actualidad.
2)¿La autoridad de Aplicación tiene previsto algún programa a nivel nacional para el tratamiento de las pilas? Indique cual y en caso negativo, explique los motivos y cual es el destino de dicho material.
3)¿Se han tomado los recaudos - legales para evitar el ingreso a nuestro país de pilas con compuestos contaminantes?. En caso afirmativo, se sirva informar : ¿Cuales han sido los resultados obtenidos de dichos controles? En caso negativo, explique los motivos de la falta de recaudos.
4)¿Se realizan campañas de información y difusión a la población sobre el efecto nocivo de las pilas y donde se las debe depositar para que luego el Estado les efectue el correcto tratamiento? Indique cuales y en que años. En caos negativo, explique los motivos.
5)¿Los planes, y estudios antes referidos están a disposición de personas físicas u organizaciones que los requieran, y donde solicitarlos?

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


Las pilas y baterías usadas son residuos peligrosos que deben depositarse en contenedores específicos
Las pilas y baterías son residuos que se producen muy frecuentemente en hogares, comercios, talleres, industrias y prácticamente en cualquier sector de actividad de nuestra sociedad.
Muchas pilas y baterías contienen sustancias que hacen que estos productos, cuando llegan al final de su vida útil, se conviertan en residuos peligrosos. Entre los elementos peligrosos que pueden contener están algunos metales como el mercurio, plomo y cadmio, conocidos por una serie de efectos perjudiciales graves y probados para la salud humana y el medio ambiente.
Ventajas de su correcto tratamiento
Las pilas y baterías se pueden considerar una fuente de materias primas secundarias. Entre los metales valiosos que pueden ser recuperados de las mismas se encuentran el níquel, el cobalto y la plata. Con una correcta gestión, además de recuperar materiales valiosos, se pueden separar distintas materias que están presentes en las baterías, tales como ácidos, y sales evitando daños de estas sustancias al medio ambiente.
La sustitución de metales vírgenes en la producción de nuevas baterías por metales reciclados disminuye el gasto de energía y los impactos ambientales negativos derivados de la extracción del mineral virgen.
Utilizar cadmio o níquel reciclados exige un 46% y un 75% menos de energía primaria, respectivamente, en comparación con la extracción y refinado de los metales vírgenes. Tratándose del cinc, la relación entre la energía necesaria para el reciclado y la necesaria para la extracción de recursos primarios es de 2,2 a 8. Estas cifras podrían ser particularmente significativas por el hecho de que la producción primaria de metales es responsable de aproximadamente un 10% de las emisiones mundiales de CO2
Es importante observar que los llamados residuos peligrosos universales se encuentran en una zona gris entre el concepto de simple residuo peligroso y residuo domiciliario, aún no resuelta por ninguna normativa en nuestro país" y que un informe de la investigadora Susana Papale dice *que: aunque las pilas son una cómoda fuente de energía productora de electricidad a partir de reacciones químicas, una vez agotadas en la basura constituyen un residuo especialmente peligroso.
A todas las llamamos genéricamente pilas, pero sus nombres son variados y derivan de la composición interna. Pueden ser alcalinas, carbón-zinc, níquel-cadmio, botón según tengan mercurio, litio y óxido de plata, zinc-aire.
De ellas se alimenta hoy buena parte de la aparatología que usa el hombre moderno, pero el problema principal comienza en el momento de arrojarlas a la basura, ya que, por ejemplo, una micrópilo de mercurio puede contaminar 600.000 litros de agua al liberar sus componentes de mercurio o cadmio, el cual al entrar en contacto con la tierra y posteriormente cuando perchonan y llegan a la ñapa de agua, contaminan la cadena alimentaría.
Si tomamos en cuenta que, sólo en Estados Unidos se eliminan 200 millones de pilas por año, nos daremos cuenta que el tema es más que preocupante.
Cuando la industria electrónica logró niveles de miniaturización casi inimaginables en sus diseños, con la consiguiente facilidad para la fabricación de aparatos portátiles, se produjo una gran explosión de producción seguida de un gran consumo. Al igual que en muchos otros rubros, la industria y el comercio no se preguntaron por el impacto que causarían en el medio ambiente tales productos. Así nos encontramos hoy en el mundo y en nuestro país, que no ha escapado a esta corriente, con el uso creciente de pilas, sin haber desarrollado métodos adecuados para la eliminación o reciclado de estos elementos.
No existen iniciativas gubernamentales tendientes a buscar soluciones a pesar de considerar a la pila un residuo peligroso según la ley nacional 24.051. La ley llama sustancias ecotóxicas a todo aquel desecho que si se libera, produce efectos adversos inmediatos o retardados en el medio ambiente.
Han surgido en los últimos años algunas experiencias llevadas a cabo por organizaciones no gubernamentales (ONG), en diferentes puntos del país tales como Bariloche, Córdoba y Mar del Plata, pero aún no se puede afirmar científicamente con absoluta seguridad sobre los resultados de esas experiencias (vitrificación, encapsulado, enterramiento, etc.).
En otros países, tales como Suecia, desde 1986 se hace recolección de pilas.
En Suiza se consideran residuos peligrosos y está prohibido enterrarlas o depositarlas en rellenos sanitarios. En este país se recupera el mercurio, el zinc y el manganeso para ser reciclados, además de alentar el uso de equipos con pilas recargables, teniendo dichos aparatos un descuento del 10% y una etiqueta con el símbolo ISO, que alerta al consumidor sobre la peligrosidad de las pilas, recordando al usuario que una vez agotadas deben retornar al punto de venta.
En Austria desde 1991 se prohíbe arrojarlas con la basura común.
En España desde 1993 ya no se fabrican pilas con alto contenido de mercurio y en Alemania obligan al fabricante y al comerciante a reciclarlas desde 1993.
La Asociación Europea de Fabricantes de Pilas Secas (Euro pile), es una entidad que representa a varias compañías y propuso e instrumentó un programa de reducción gradual del uso del mercurio. Desde 1994 ya no se fabrican pilas con dicho metal pesado. Finalmente, en Japón se reciclan.
Es conveniente el uso de aparatos conectados a la red eléctrica y preferir las pilas recargables, si bien son más caras y contienen cadmio, su durabilidad las hace menos peligrosas.
Otra alternativa es optar por las pilas alcalinas con mínimo de mercurio y preferentemente opciones de las que se puede hacer uso.
También es recomendable usar calculadoras o aparatos a energía solar y no dejar las pilas al alcance de los niños. Pueden llevarlas a la boca y hacer una inconsciente ingesta de metales pesados con su consiguiente peligro para la salud.
Los fabricantes de pilas tienen la responsabilidad de colaborar en la solución apropiada que evite la contaminación producida por sus productos, poniendo toda su tecnología al servicio del ambiente.
El Estado debe intervenir urgentemente para definitivamente establecer los mecanismos que faciliten la recolección de las mismas en recipientes adecuados y adoptar las medidas para su reciclado y destino final ambientalmente seguro (relleno de seguridad para residuos peligrosos).
Esta tema compromete por igual a fabricantes, técnicos y gobiernos, quienes deben desarrollar obligatoriamente y a la brevedad, métodos eficaces para la eliminación segura de las pilas y evitar así el impacto ambiental que producen sus componentes contaminantes, poniendo en práctica políticas ambientales que hagan de la calidad de vida no una declaración sino una realidad.
Para concluir es preciso tener en cuenta la Ley Nacional de Residuos Peligrosos número 24051, la cual incluye con la categoría de desechos peligrosos a aquellos que tengan como constituyentes, compuestos de zinc, cadmio, mercurio, etc.
Las pilas responden a esa caracterización de sustancias peligrosas llamadas ecotóxicas porque son desechos que, si se liberan, tienen o pueden tener efectos adversos inmediatos o retardados en el medio ambiente.
Por todo lo expuesto, invito a mis pares que me acompañen en la aprobación del presente proyecto.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
BIANCHI, IVANA MARIA SAN LUIS FRENTE PERONISTA
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
RECURSOS NATURALES Y CONSERVACION DEL AMBIENTE HUMANO (Primera Competencia)
ACCION SOCIAL Y SALUD PUBLICA