La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar el más profundo repudio a las amenazas recibidas por el Juez Carlos Rozanski y el personal del Tribunal Oral Criminal Federal N° 1 de La Plata, que afectan la garantía de una justicia idónea, imparcial e independiente.

Señor presidente:

El Juez Carlos Rozanski viene asumiendo sostenidamente un firme compromiso con los juicios por delitos de lesa humanidad. Debemos recordar el fallo histórico que condenó a reclusión perpetua a Miguel Etchecolatz bajo la novedosa figura de genocidio en el año 2006, tras encontrarlo culpable de crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura. Etchecolatz se convirtió así en el segundo represor condenado en un juicio oral y público por violaciones de los derechos humanos -el primero fue "El Turco" Julián- tras la anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.

Rozanski fue víctima de amenazas en otras oportunidades, una de ellas tras la condena a reclusión perpetua a Etchecolatz. La última, a días del inicio del juicio por los delitos del Circuito Camps, que en septiembre de 2011, condenó a prisión perpetua a un civil, el ex ministro de Gobierno de la dictadura, Jaime Smart, junto a otros 25 imputados. En esta oportunidad las amenazas no solo van contra el Juzgado Federal sino contra la familia del Juez.

Es evidente que los avances judiciales de algunos tribunales dispuestos a determinar las responsabilidades y complicidades de sectores de la población hasta ahora excluídos, como es el juzgamiento a los cómplices civiles de la última dictadura, molestan.

Sin lugar a dudas el Juez Rozanski viene desempeñándose y acompañando con firmeza las políticas públicas en materia de derechos humanos, que ha llevado adelante el Estado Nacional desde hace ya más de diez años.

Es con este repudio enérgico que ratificamos una vez más el rumbo trazado, memoria, verdad y justicia.