La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Dirigirse al Poder Ejecutivo para que, a través del Ministerio de Justicia y de Derechos Humanos y demás organismos competentes, informe sobre las siguientes cuestiones vinculadas a denuncias efectuadas por internos del Complejo Federal II de Marco Paz, conforme a las cuales personal del Servicio Penitenciario Federal les habrían encargado el homicidio del Procurador Penitenciario de la Nación, Francisco Mugnolo, y del Director General de Protección de Derechos Humanos del mismo organismo, Ariel Cejas Meliare:

1. Qué medidas se han adoptado para garantizar la seguridad de los funcionarios de la Procuración Penitenciaria amenazados;

2. Qué medidas se han adoptado para garantizar la seguridad e integridad física de los internos que realizaron la denuncia contra personal del Servicio Penitenciario Federal;

3. Si se ha iniciado algún sumario tendiente a sancionar la conducta del Director del Servicio Penitenciario Federal, Alejandro Marambio, quien al tomar conocimiento de la denuncia manifestó que era un "invento" del Procurador y agregó: "¿Para qué lo van a matar? Si se está yendo, no existe más. Si se muere solo, ¿para qué lo van a matar?", conforme lo publicado en fecha reciente por un matutino;

4. Si se han iniciado sumarios administrativos vinculados con los hechos denunciados, con independencia de la causa judicial en trámite, se informe detalle de los mismos: personal y funcionarios investigados, cargo, conducta investigada y toda otra información relevante.

Señor presidente:

Según una denuncia, radicada en el Juzgado Federal Nº 1 de Morón, realizada por una persona privada de libertad en el servicio penitenciario de Marcos Paz, se habría encargado el asesinato de dos altos funcionarios de la Procuración Penitenciaria de la Nación: Francisco Miguel Mugnolo y Ariel Cejas Meliare, Procurador Penitenciario de la Nación y Director General de Protección de Derechos Humanos del mismo organismo, respectivamente.

De dicha denuncia surge que el personal del servicio habría entregado a tres internos una pistola calibre 22, color negra, con cinta aisladora en la culata, con cinco balas. Además aseveró que la misma estaba escondida en el "plafón de la primera puerta corrediza de acceso al pabellón 5" (1) .

En el marco de esas causas, se recogieron varias declaraciones testimoniales. A raíz de las mismas, la Seguridad Interna del Sistema Penitenciario Federal revisó el pabellón 5, "desarmó la parte superior de una puerta -el lugar señalado en la denuncia- y halló la pistola y su cargador. Por si fuera poco, también encontraron cuatro facas (cuchillos caseros)" (2) .

Dada la gravedad de estos acontecimientos, solicitamos al Poder Ejecutivo que informe sobre los hechos ocurridos y las medidas tomadas en consecuencia.

Además de lo mencionado, y como consecuencia de esta graves situación, Alejandro Marambio, Director del sistema Penitenciario Federal, dijo al Diario Clarín que la imputación denunciada por Mugnolo "es un acto para "victimizarse" en vísperas de una posible remoción de su puesto. "¿Para qué lo van a matar? Si se está yendo, no existe más. Si se muere solo, ¿para qué lo van a matar?" (3) .

Consideramos que la respuesta brindada por el titular del Servicio Penitenciario es de suma gravedad, por cuanto manifiesta un profundo desprecio por el respeto de las instituciones y por la seguridad y garantía de los derechos humanos, encara el asunto como si se tratara de una cuestión personal -también repudiable-, obviando que se encuentran en juego dos instituciones fundamentales en lo que hace a la vida de las personas privadas de su libertad, plantea cuestiones totalmente ajenas a su ámbito de actuación y denota su desprecio frente a la gravedad de las cuestiones denunciadas, en las que se encuentra en juego la integridad de dos funcionarios. Al respecto, y dada la gravedad de estas declaraciones, solicitamos al Poder Ejecutivo que informe sobre la existencia de sumarios administrativos para sancionar a Marambio.

Finalmente, también interesa conocer las medidas adoptadas para garantizar la integridad física de los denunciantes, teniendo en cuenta que se encuentran bajo la órbita del mismo servicio penitenciario al que están denunciando. El recuerdo de lo ocurrido con Julio López debe servir de suficiente alarma para tomar todos los recaudos necesarios en casos en los que existen testigos o denunciantes que comprometan la responsabilidad de miembros de fuerzas de seguridad.

Por las razones expuestas, solicitamos la aprobación del presente pedido de informes al Poder Ejecutivo.