La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su más decidido apoyo al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y a su Relatoría para la Libertad de Expresión, frente a los intentos de recortar sus atribuciones y coartar su independencia. Asimismo, insta al Poder Ejecutivo Nacional a expresar enfáticamente su apoyo a estas organizaciones.

Señor presidente:

Desde el año 2011, un grupo de países latinoamericanos, liderados por Ecuador, han planteado la necesidad de reformar la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y en particular su Relatoría para la Libertad de Expresión. Dicha relatoría es la encargada de monitorear el estado de la libertad de expresión en los países pertenecientes al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, velando por el mantenimiento de la pluralidad y la capacidad de los ciudadanos de expresarse libremente en todos los ámbitos.

Esta propuesta de reforma fue redactada por un Grupo de Trabajo creado el 29 de junio 2011 por la misma OEA a petición de los Estados partidarios de la misma, y se basa en tres propuestas principales:

1- Se incorporaría todos los informes de las relatorías en un capítulo único del informe anual de la CIDH. De esta forma, los informes en los que la Relatoría de Libertad de Expresión analiza con detenimiento la situación en cada uno de los países perderían visibilidad, al verse inmersos en el conjunto de informes de las otras dependencias de la CIDH.

2- Se asignarían recursos "adecuados, suficientes y balanceados" a cada relatoría, grupo de trabajo y unidad de la CIDH. Así, la Relatoría de Libertad de Expresión perdería los fondos independientes que recibe, que hacen que su presupuesto sea mucho mayor al de otras dependencias de la OEA y no dependa de la voluntad de los países.

3- Se establecería un Código de Conducta que regule la gestión de las relatorías para asegurar la coordinación con los Estados miembros. Esto podría restringir la posibilidad de que la relatoría emita comunicados sobre ciertos temas de actualidad.

Un breve análisis de estas propuestas deja en claro que el espíritu detrás de este intento de reforma no es el fortalecer la CIDH ni la Relatoría de Libertad de Expresión, sino coartar su funcionamiento para que dejen de cumplir el indispensable rol que tienen en materia de defensa de las libertades ciudadanas y los Derechos Humanos.

Las organizaciones no gubernamentales que se trabajan en la defensa de la Libertad de Expresión se han pronunciado de forma unánime en contra de esta pretendida reforma. En un comunicado conjunto, titulado "La Relatoría de Libertad de Expresión no es un juguete político", Reporteros sin Fronteras y la Asociación Mundial de Radios comunitarias expresaron que "Lejos de ser un ajuste administrativo, la reforma del funcionamiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) aprobaría la deplorable ofensiva política de algunos Estados contra una de sus instancias, gran soporte de la defensa de las libertades públicas en el continente: la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión."

A pesar de la ofensiva ecuatoriana, liderada por el presidente Rafael Correa, no existe consenso en los países miembros de la OEA para aprobar las reformas planteadas, que como se ha dicho implicarían desmantelar gran parte de la independencia y la capacidad de la Relatoría. Sin embargo, los pedidos de reforma no han cesado, y se debatirán nuevamente en la Asamblea General de la OEA del 22 de marzo de 2013 en Washington.

La República Argentina conoce de cerca la importancia fundamental de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, primer organismo internacional que se presentó en Buenos Aires en 1979 para investigar las denuncias de aberrantes crímenes enmarcados en el siniestro terrorismo de estado de la última dictadura militar. Es necesario entonces que la Argentina exprese en la próxima Asamblea General un enfático apoyo a la CIDH y a toda su labor.

En defensa de la vigencia del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, y de la libertad de expresión en nuestro continente, solicito a mis pares la aprobación de este proyecto.