El Senado y Cámara de Diputados...

Artículo 1: Requiérase al PODER EJECUTIVO DE LA NACION que a través del BANCO DE LA NACION ARGENTINA, establezca las decisiones y procedimientos conducentes para condonar las deudas impagas originadas en préstamos concedidos a pequeños productores agropecuarios de esa PROVINCIA, hasta la suma de doscientos mil pesos ($200.000.-) .

Artículo 2: Los pequeños productores agropecuarios de la PROVINCIA DEL CHACO, alcanzados por la presente disposición, serán aquellos cuya principal actividad sea la agropecuaria y forestal y estén domiciliados legalmente en dicha Jurisdicción.

Artículo 3: La condonación a operarse conforme a lo dispuesto en el artículo primero de la presente, se aplicará hasta la suma allí establecida como monto tope para cada deudor registrado en el BANCO DE LA NACION ARGENTINA, se tratare de una persona física o persona jurídica y estuviera originada en una o varias operaciones crediticias.

Artículo 4: Para el tratamiento de aquellas deudas remanentes que quedaran a favor del BANCO DE LA NACION ARGENTINA por parte de los pequeños productores agropecuarios de la PROVINCIA DEL CHACO, una vez operada la condonación dispuesta, invítese al Gobierno de esa PROVINCIA a disponer un régimen que favorezca su cancelación a través de tasas de interés compatibles con la producción social y refinanciamiento a mediano y largo plazo.

Artículo 5: Dispónese que la Autoridad de Aplicación de la presente Ley será el MINISTERIO DE ECONOMIA Y PRODUCCIÓN DE LA NACION, disponiendo a través de dicha Jurisdicción las resoluciones que competan al BANCO DE LA NACION ARGENTINA.

Artículo 6: El PODER EJECUTIVO DE LA NACION procederá reglamentar la presente norma dentro del plazo de treinta días de su promulgación.

Artículo 7: De forma.

Señor presidente:

Esta iniciativa legislativa lleva implícita una actitud reivindicativa, frente al sufrimiento de miles de productores que no pueden resolver sus problemas de endeudamiento con el Banco de la Nación Argentina, provocados por las políticas de estado de la pasada década.

Los productores afectados no solamente padecen esta agresión anímica que convoca a la depresión y falta de expectativas, sino que algunos ya perdieron sus campos y parte de ellos están demandados por el Banco estatal. Por otra parte, las refinanciaciones y/o reprogramaciones de deudas establecidas en algún momento, sirvieron para los deudores de mayor escala económica, pero no fueron útiles para muchos por la imposibilidad de cumplir con las exigencias planteadas. En su mayoría los pequeños y medianos productores son los que están en las condiciones descriptas.

Nos encontramos con un segmento de productores que no pagaron porque no pudieron , no porque no quisieron; ya sea porque están en emergencia y/o desastre o fuera del sistema productivo, o porque el producto no es rentable, o la deuda supera al capital

El endeudamiento de pequeños y medianos productores agropecuarios chaqueños debe ser considerado en forma diferencial al endeudamiento de otros sectores, teniendo en cuenta los riesgos extraproductivos que tienen, derivados de factores externos como son: la falta de obras de infraestructura y su consecuencia frente a fenómenos climáticos; variaciones en los tipos de cambio y su influencia en la formación de precios en los mercados; el riesgo de la voracidad fiscal y la arbitraria relación de productos e insumos; altos costos en fletes y transportes.

Se necesita y amerita una justa y definitiva solución. Es de imperiosa necesidad la definición de una nueva política agropecuaria que contemple las herramientas necesarias para revertir el proceso de concentración económica; para avanzar hacia el desarrollo de las economías regionales y los pueblos del interior con espíritu y acción federal, entre otros aspectos centrales.

Agravo el endeudamiento de nuestros productores la ausencia de políticas de estado inclusivas para las producciones rurales familiares. Siempre sostuve que la pequeña y mediana empresa debe ser tratada en forma diferencial (esto incluye el aspecto crediticio) con respecto a otras actividades económicas por la importancia estratégica que representa para el desarrollo inclusivo y equitativo del país. En la actualidad la agricultura industrial, a gran escala y de voluminosos capitales, es una clara amenaza para el pequeño y mediano productor por su poder de concentración de la renta. Una actividad no debe cercenar a la otra en un país republicano y federal.

Estos productores pertenecen a una economía regional duramente afectada por problemas climáticos y de rentabilidad. El endeudamiento que sufren no es un problema de difícil solución porque no tiene una magnitud que lo convierta en una carga imposible de manejar para el Banco de la Nación si es insolvente, ni tampoco se pretende ayudar o subsidiar a empresas que buscan transferir riesgos al estado. Por el contrario, se busca que auténticos productores encuentren una respuesta favorable para volver a ser sujetos activos del circuito productivo .

Por todo ello Sr. Presidente, le solicito la aprobación de este proyecto de Ley.