La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

La Cámara de Diputados de la Nación DECLARA: Expresar el más enérgico repudio y preocupación, respecto del aviso publicitario, de la empresa "EASY", especializada en venta de productos y servicios para la construcción, decoración y diseño del hogar.

Señor presidente:

Señor Presidente, la publicidad se considera ofensiva, cuando transgrede los valores y principios de nuestro sentimiento patriótico como argentinos. Es por ello que sorprende la campaña publicitaria del hipermercado de construcción EASY, la torpeza y ligereza con la que aborda un contenido histórico, tan valorado por el pueblo argentino.

En efecto el comercial en cuestión, ambientado en la etapa de la liberación de América, versa sobre un militar de alto rango que personifica al General San Martín, incitando a sus milicias criollas a que ''luchen para conseguir un Feriado''. El aviso es tan burdo y grotesco que probablemente induzca al rechazo de los consumidores y por consiguiente al retiro de la publicidad de los medios de comunicación, sin más.

No obstante ello, siendo que oportunamente he presentado un Proyecto de Resolución, en el cual dejaba en evidencia la problemática de la publicidad ofensiva, es que vengo nuevamente a expresar mi rechazo a lo que considero otro golpe bajo publicitario. El referido proyecto fue ingresado a la HCDN, con el acompañamiento de la Diputada Laura Esper y el Diputado Gilberto Alegre, con fecha 2 de Marzo del presente año, Expediente N° 21 D - 15, ( Solicitar al Poder Ejecutivo de la Nación disponga, a través de los organismos competentes, prohibir todo aviso publicitario que en su contenido incite y valorice las conductas y comportamientos de irresponsabilidad, falta de respeto, de ética y/o moral, así como aquellas que conlleven a perjuicios físicos y/o psíquicos).

Atenta a la publicidad que hago mención, me veo nuevamente obligada, en mi rol de representante del pueblo que me ha elegido; a señalar lo grosero e irresponsable que resulta tratar despectivamente, desde la Publicidad al - nada más, ni nada menos que- PADRE DE LA PATRIA. Cada país tiene sus próceres, de acuerdo a la causa a la que hayan servido y al alcance de sus logros. Los trabajos de estas selectas personas han trascendido sus fronteras, como ocurre con aquellos que lucharon por liberar a varias naciones del colonialismo y la opresión. El despropósito de oscurecer nuestra historia debe hacernos reflexionar hacia donde nos lleva el destino, de seguir por un sendero de falta de respeto, desvalorización de la esencia patriótica e impertinencia.

En esta ocasión desdeñando la relevancia de las acciones, de nuestro "General Don José de San Martin". El ejercicio publicitario no debe inmolar la inteligencia, el respeto y la ética, burlándose alegremente de todo lo que resulta caro a nuestra tradición, esto lo coloca en un lugar injurioso e irritante. Aunque sí así lo hiciere, las empresas, tienen la potestad de admitir o no la publicidad. En este caso en particular CENCOSUD, siempre puede rechazar la propuesta de la agencia de publicidad, atento a conformar un eslabón más de la cadena de Responsabilidad Social Empresaria.

Es de destacar que se tornan gravitantes los reclamos de particulares y organizaciones que consideran a estas piezas como ofensivas para el público. En la medida que esas voces se hagan oír, los anunciantes no tendrán más remedio que evitar caer en esta clase de avisos. La sensación predominante es que muchos publicitarios, en su deseo de destacarse, se sumergen en caminos resbaladizos que se vuelven un boomerang para sus autores. El proceso da cuenta de una provocadora falta de cuidado en las empresas, que más temprano que tarde, deben hacer un pedido de disculpas que no consigue quitar en muchos, la sensación de descontrol en la administración de su marketing publicitario.

Por otro lado, la publicidad ofensiva no es invención de estos tiempos. La técnica de la trasgresión ha sido, muchas veces fructífera.

Uno de los clásicos argumentos exculpatorios es la apelación al humor y al impacto exacerbando la gracia. Esa explicación no constituye una excusa válida. La industria de la publicidad no es inocente. Lo que ha pasado en las últimas décadas, es que la competencia por atraer la curiosidad de los consumidores se ha incrementado enormemente, provocando que muchos anunciantes tuvieran que recurrir a todo tipo de abusos para adquirir notoriedad.

Con la existencia masiva de imágenes en nuestra vida diaria, cada vez es más dificultoso para los publicistas ganar al público al que se dirigen y hacer que se fijen en ellos evitando pasar desapercibidos. Pero esto no autoriza en modo alguno, a creaciones desagradables.

Cuando empresarios, ejecutivos de mercadotecnia y publicistas se exponen a desarrollar una campaña publicitaria que sea impactante, original y persuasiva para incrementar sus volúmenes de venta u obtener un determinado resultado a corto plazo, deben tener mucho cuidado de no utilizar mensajes que, para captar la mirada pública o para inclinarla eficazmente, induzcan a golpes bajos o hieran susceptibilidades como en este caso. De esta manera, evitarán sorpresas que pueden afectar seriamente el valor de la empresa en cuestión, su inversión en la campaña publicitaria y hasta su misma credibilidad.

Por lo expuesto solicito a mis pares, acompañen el presente proyecto de resolución.